Aunque todavía está a nivel de rumor, ya se da por hecho en el medio de las telecomunicaciones que el exsecretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, regresará al sector, ni más ni menos que como Presidente de Telefónica
Móviles en México.
En Telefónica Móviles ni niegan ni confirman el rumor, pero se afirma que después de analizarlo mucho finalmente Gil Díaz aceptó el ofrecimiento. El anuncio oficial se hará en los próximos días.
Desde luego, aquí sí no habría ningún conflicto de interés porque se trata de una empresa que no pertenece a un sector directamente regulado por Gil Díaz, como sí lo es el banco HSBC en México. Por más que se argumente que como asesor independiente de HSBC en Londres, Gil Díaz no estará involucrado directamente en la operación del banco en México, se trata finalmente del mismo grupo financiero, que es precisamente donde reside el meollo de las críticas que se han hecho al exsecretario de Hacienda, ya que no esperó el año que marca la Ley para trabajar en una empresa donde pudiera hacer uso de información privilegiada.
Si bien es cierto que como Secretario de Hacienda mantuvo durante todo el sexenio un interés especial en el sector de las telecomunicaciones -como fue evidente con su enfrentamiento público con el exsecretario de Comunicaciones y
Transportes, Pedro Cerisola- la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) no es regulador ni de Telefónica ni de ninguna otra empresa del sector, por lo que aquí sí no hay ningún conflicto de interés y no es necesario que espere el año que marca la Ley.
Los dos pleitos más importante entre Gil Díaz y Cerisola fueron: primero, por la tajante oposición del exsecretario de Hacienda para aprobar los reglamentos de la SCT y de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) que se
quedaron en el tintero; el segundo, fue a fines del sexenio, por el posible cobro de una contraprestación a Telmex para que pueda ofrecer servicios de triple play.
Quien seguramente estará preocupado ante la posibilidad de que Gil Díaz esté al frente de Telefónica Móviles es Carlos Slim Helú, presidente de Grupo Carso, porque como director general de Avantel, Gil Díaz fue un feroz competidor y mantuvo una lucha legal permanente con un alud de amparos y litigios para presionar tanto a Telmex y Telcel como a la SCT y a la Cofetel a una mayor apertura del sector de telefonía.
De hecho, se rumora que Luis Mancera, procurador Fiscal, quien como Director Jurídico de Avantel fue conocido como el «zar de los amparos», podría dejar la SCHP para incorporarse al equipo de Gil Díaz.
Sin embargo, el propio Mancera desmiente el rumor y asegura que por lo pronto su compromiso es con Agustín Carstens, el titular de la SCHP.
Lo que es un hecho es que el ingreso de Gil Díaz a Telefónica está ya generando mucho ruido y hay quien afirma que este nombramiento es la verdadera razón de la ola de críticas a las que ha estado sujeto el exsecretario de Hacienda en varios medios, en los que se cuestiona no sólo el hecho de que haya aceptado ser Consejero Independiente de HSBC Holdings, sino su actuación como Secretario de Hacienda, en temas que han estado en la polémica desde hace años como son Isosa y los problemas en Aduanas.
Se afirma también -desde luego, sin ninguna prueba- que Gil Díaz es, a través de Luis Mancera, la mano que mece la cuna en los amparos que presentaron en contra de la Cofetel, Rafael del Villar, subsecretario de Comunicaciones de la SCT, y Gonzalo Martínez Pous, director Jurídico.
Si bien es cierto que Martínez Pous sí trabajó directamente en la Procuraduría Fiscal, Del Villar trabajaba en el Banco de México, sin ninguna relación directa ni con Luis Mancera ni con Gil Díaz, y los amparos se presentaron mucho
antes de que concluyera el sexenio y del ofrecimiento de Telefónica a Paco Gil.
Fuente: El Economista, Maricarmen Cortés
