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Necesario, aumentar la seguridad informática

El spam y hasta los iPods podrían ser un riesgo para los cibernautas

Correo electrónico no deseado, páginas fraudulentas y robo de información son sólo algunas de las amenazas a las que estamos expuestos, incluso la pérdida de un dispositivo móvil que contenga información o fotografías personales puede ponernos en riesgo.

De acuerdo con Francisco Villegas, director de Protgt, “una fuente real para un secuestro es tener fotografías en el iPod, por ello es necesaria una mayor difusión de soluciones de seguridad”.

El correo electrónico es el punto más vulnerable, tan sólo en 2007 el spam creció 400%, los hackers aprovechan puntos de interés para ganar dinero. Una práctica común es el envío de tarjetas electrónicas que parecen venir de un amigo pero que en realidad sirve para robar información, el mayor riesgo es que pueden acusar a la víctima de estar cometiendo un fraude, puesto que de su servidor se dispara la amenaza.

Aun cuando existe el peligro de culpar a un inocente, algunas empresas están tomando conciencia de la importancia de protegerse, por ello cuentan con una política que les permite supervisar la actividad de sus empleados para proteger su información, “si los delincuentes protegen la información, ¿por qué las organizaciones no?”, señala Villegas.

Dado que la forma de hacer negocios ha cambiado, las empresas ya no pueden prescindir de herramientas como el correo electrónico, aunque según datos de Protgt, 90% es spam, por lo que la compañía recomienda aplicar soluciones como el cifrado y la firma electrónica.

Si bien las corporaciones mexicanas están dando más importancia a la seguridad informática, sólo 26% señala que existe una integración de seguridad en el proceso de administración de riesgos, según Ernst & Young en su Décima Encuesta Global de Seguridad de la Información.

Los encuestados opinaron que las tres principales preocupaciones de seguridad se ubican en los medios removibles, las redes inalámbricas y la convergencia entre seguridad lógica y física.

Fuente: El Universal, México