50% de los usuarios de inteligencia artificial generativa emplean herramientas no autorizadas en sus entornos laborales, a pesar de los esfuerzos gubernamentales a nivel mundial para gestionar los riesgos y promover un uso responsable de la inteligencia artificial, según una encuesta de Salesforce.
Aunque los gobiernos han implementado medidas definidas, los resultados de la encuesta ‘Las promesas y las trampas de la IA en el trabajo’, aplicada a 14,000 trabajadores en 14 países, sugieren que las empresas no han adoptado políticas claras en relación con la implementación de esta tecnología.
La investigación revela que muchos usuarios de IA generativa en el ámbito laboral la utilizan sin recibir capacitación, orientación ni la aprobación de sus empleadores.
A pesar de reconocer la importancia fundamental de la IA generativa para el avance de sus carreras, los trabajadores, en su mayoría, carecen de directrices claras y confiables de las empresas para garantizar un uso empresarial responsable de esta tecnología.
A nivel global, el 28% de los encuestados emplea actualmente IA generativa en el trabajo, pero más del 50% lo hace sin la aprobación formal de sus empleadores. Además, un 32% adicional planea utilizar pronto esta tecnología, evidenciando que su adopción continuará, ya sea supervisada o no.
En el caso específico de México, el 58% de los trabajadores utiliza IA no autorizada como herramienta auxiliar en sus labores, y un 43% utiliza herramientas digitales prohibidas en el entorno laboral.
Sorprendentemente, el 75% indica que sus empresas carecen de políticas claras al respecto, siendo un 43% de ellos seguros de la inexistencia total de regulaciones.
No solo se constata el uso de herramientas de IA generativa no aprobadas, sino que los trabajadores reconocen la importancia de adoptar programas aprobados por la empresa para garantizar un uso ético y seguro de la tecnología.
Sin embargo, casi el 70% de los empleados en todo el mundo nunca ha recibido capacitación sobre cómo utilizar la IA generativa de manera segura y ética.
Además, se observan prácticas éticamente cuestionables, como atribuir el trabajo de la IA como propio (64%) o exagerar la habilidad para utilizar la tecnología con el fin de asegurar oportunidades laborales (41%).
A pesar de estos desafíos, en México, el 73% de los trabajadores encuentra que la IA mejora significativamente su productividad, y el 67% se identifica como ‘más comprometido’.
Sin embargo, ciertas industrias, como la de la salud, presentan un rezago significativo, ya que el 87% de los trabajadores en esta industria afirma que sus empresas carecen de políticas claras.
Esto destaca la urgencia de capacitar a los trabajadores sobre el uso responsable de la IA, especialmente en sectores que manejan datos confidenciales.
Independientemente de si los trabajadores utilizan o no la IA generativa en el trabajo, reconocen su impacto en sus carreras.
A nivel global, el 47% cree que dominar la IA generativa los volvería esenciales en el lugar de trabajo, el 51% piensa que aumentaría su satisfacción laboral, y el 44% considera que se les pagaría más que a aquellos que no dominan la tecnología.
