El 63% de los directivos y responsables de seguridad en empresas y administraciones públicas de España, Alemania, Francia y Reino Unido consideran que las amenazas basadas en inteligencia artificial (IA) representan el mayor riesgo de ciberseguridad para este año, según un estudio realizado por Palo Alto Networks.
Además, el 42% de los encuestados ya ha implementado soluciones de ciberseguridad en la mayoría de sus entidades, pero persiste una brecha significativa entre la intención y la acción, lo que refleja la complejidad tecnológica como una barrera principal.
El estudio, realizado entre casi 500 responsables de seguridad de diversos sectores, subraya que, a pesar de los avances, un alto porcentaje de las empresas aún no ha consolidado sus estrategias de ciberseguridad.
Esta tendencia se refleja en las respuestas de los encuestados, quienes indicaron que las soluciones no están completamente implementadas o no son suficientes para abordar el riesgo que representan las amenazas impulsadas por IA.
El estudio también revela un dato alarmante sobre la velocidad con la que se están produciendo los ciberataques. Mientras que hace algunos años los ciberataques podían prolongarse durante varios días, hoy en día, el 50% de los ataques de expropiación de datos se consuman en menos de 24 horas, y el 20% de estos incidentes se resuelven incluso en pocas horas.
Este cambio está vinculado a un contexto geopolítico global ‘frágil’, según destacó Helmut Reisinger, responsable de Palo Alto Networks para Europa, Oriente Medio, África y Latinoamérica.
Los datos de la empresa confirman que los cibercriminales se están beneficiando de tecnologías avanzadas, incluida la IA, para agilizar los ataques y el robo de datos.
De forma paralela, el 55% de las empresas ya están implementando IA para detectar amenazas de manera más rápida y automatizar respuestas a incidentes de ciberseguridad.