Una versión virtual de Miguel Ángel, denominada Michelangelo AI, fue presentada en Italia por parte de la Obra de Santa Maria del Fiore de Florencia.
Esta plataforma fue elaborada a través de Inteligencia Artificial y es capaz de conversar y responder a las preguntas que se le realicen mediante un sistema de chatbot.
Michelangelo AI, el doble virtual del artista Miguel Ángel Buonarroti, responde a preguntas en inglés y fue creado en colaboración con la empresa estadounidense Querlo, con la idea de ser usado como herramienta educativa.
‘Soy Miguel Ángel, uno de los artistas renacentistas más famosos, hablándote a través de la Inteligencia Artificial. Aquí está mi autorretrato en una Piedad que esculpí en mi vejez, hoy en el Museo de la Catedral de Florencia’, responde Michelangelo AI a través de un chatbot al preguntarle por su identidad.
Su extenso conocimiento virtual proviene del equipo de historiadores del Museo de la Opera del Duomo de Florencia, aunque la tecnología de la inteligencia artificial permitirá ampliar su base de conocimiento a partir de las conversaciones que mantenga, informó la institución en un comunicado.
Este proyecto busca familiarizar al visitante del museo con los monumentos de los que es responsable la Opera di Santa Maria del Fiore como la catedral de Florencia o la cúpula de Brunelleschi y para poner en valor la historia de esta institución florentina que encargó obras a Miguel Ángel en el siglo XVI.
La idea de Michelangelo AI nació durante la pandemia, según afirma el director del Museo de la Opera del Duomo, Timothy Verdon, haciendo imposible que la gente visite ciudades especiales como la Florencia de Miguel Ángel.
‘Dar vida al famoso artista reduce la distancia, lo que permite a los visitantes virtuales acercarse a uno de los grandes espíritus de nuestra civilización, dialogar con él sobre el arte y la vida y, a través de él, descubrir un equilibrio diferente, antiguo y nuevo al mismo tiempo’, relató el director en la nota.
El Miguel Ángel virtual subraya la importancia de la experiencia de sus años de formación en Florencia para su arte, su pensamiento y su espiritualidad y menciona a Donatello, el artista del Renacimiento temprano que más admiraba, y a Ghiberti y Luca della Robbia, según explicó la Opera di Santa Maria del Fiero.