Las acciones en el mercado bursátil estadounidense subieron a un máximo histórico, impulsadas por un repunte renovado de las compañías tecnológicas, ya que los inversionistas esperan una inyección de gasto de 1,900 millones de dólares por parte del gobierno federal.
El índice NASDAQ 100 subía más de 2.5% mientras continuaba recuperándose de una caída que lo había llevado a 11%, por debajo de su récord de febrero.
Los fabricantes de chips marcaron el ritmo del avance tecnológico. Twitter saltaba 5.7%, mientras que Tesla continuó su recuperación. Coupang, el gigante coreano del comercio tecnológico, obtuvo un 41% en su debut del mercado. Verizon vio una creciente demanda por su venta de deuda de 25 mil millones de dólares.
El rendimiento de los bonos del tesoro a 10 años redujo un aumento después de una subasta de notas de 30 años.
Las solicitudes de desempleo cayeron más de lo previsto, lo que indica un impulso del mercado laboral cuando el presidente Joe Biden firmó el proyecto de ley el jueves, antes de un discurso en horario de máxima audiencia en la nación. El dólar se desplomó frente a sus principales pares.
‘Nos dirigimos a nuevos máximos, debido a que todo ese dinero de estímulo que se está gastando y tiene una base más amplia que los primeros dos programas de estímulo’, dijo Chris Gaffney, presidente de mercados mundiales de TIAA Bank.
Los activos de riesgo reanudaron su repunte generalizado, con el despliegue de vacunas en todo el mundo y Estados Unidos está preparado para lograr un crecimiento económico no visto desde la década de 1980.
La preocupación de que la explosión provocaría un brote de inflación disminuyó después del informe del miércoles más débil de lo esperado sobre los precios del consumidor, mientras que el informe del jueves sobre las solicitudes de desempleo mostró una gran holgura en el mercado laboral.
Mientras tanto, el BCE (Banco Central Europeo) se comprometió a aumentar su compra de deuda pública en los próximos meses, en un intento por contener el aumento de los rendimientos de los bonos que amenazan con descarrilar la recuperación económica de la religión.
Si bien los formuladores de políticas ahora se están comprometiendo a realizar compras anticipadas, aún mantuvieron sin cambios el total del programa de compra de bonos pandémicos de 1.85 billones de dólares.