El Gobierno de Italia destinará 609 millones de euros a subvenciones para que más de 850,000 empresas aumenten su velocidad de conexión, una iniciativa que se enmarca en las acciones encaminadas a digitalizar el país, en buena parte con fondos europeos.
El Ministerio de Desarrollo Económico informó hoy que destinará, a través de su controlada Infratel Italia, 609 millones de euros a la digitalización del tejido productivo, pero no entró en detalles sobre los tiempos de concesión.
El segmento al que se dirigirá esta suma variará desde un mínimo de 850,000 hasta un máximo de 1,400,000 empresas, que podrán solicitar un bono único, de entre 300 y 2,000 euros, y para un periodo de un mínimo de 18 meses hasta un máximo de 36 meses, para conseguir un aumento de la velocidad de conexión, explicó en una nota.
La ayuda podrá incrementarse en otros 500 euros más en caso de que la empresa beneficiaria deba cubrir otros costos, pero tendrán que estar debidamente justificados.
El ministro de Desarrollo Económico, Giancarlo Giorgetti, señaló que estos recursos servirán para reducir la brecha digital del sistema productivo y alentó al Gobierno a seguir aprovechando las oportunidades de los recursos procedentes del plan europeo de recuperación tras la pandemia.
Italia ha desarrollado un Plan de Recuperación dotado de unos 220,000 millones de euros, de los que 191,500 procederán de fondos europeos y el resto serán recursos nacionales, y está dividido en seis áreas de actuación.
De ellas, la digitalización es la segunda que más inversión recibirá, un total de 40,290 millones, el equivalente al 21.05% del total de los recursos del proyecto, solo por detrás de la transición ecológica, que se llevará 59,460 millones, el 31.05%.
Italia ha asegurado a la Comisión Europea (CE) que cumpliría 51 objetivos para final de este año, compromiso que ya ha logrado, según el Ejecutivo del primer ministro italiano, Mario Draghi, y que es esencial para que reciba el primer desembolso de los fondos europeos por valor de 24,100 millones de euros brutos (11,500 millones en transferencias directas y 12,600 millones en préstamos).
Roma ya obtuvo en agosto 24,900 millones en concepto de adelanto, el equivalente al 13% del total, sin necesidad de haber cumplido ninguna meta.
Por eso, a la cifra bruta que Bruselas le entregará a principios de 2022 y a los siguientes tramos hasta 2026 se les descontará el 13%. El monto neto que Roma espera recibir a principios de 2022 será por tanto de 21,000 millones de euros.
El anterior Gobierno de Giuseppe Conte creó una especie de alcancía, que dotó con 30,000 millones nacionales y que el Ejecutivo de Draghi amplió hasta los 40,000 millones, que sirve al país para adelantar el dinero que después recibirá de Bruselas, para evitar situaciones de dificultad si se producen retrasos en las entregas.
