Amazon ha invertido miles de millones de dólares en bienes raíces que planea usar para una nueva generación de almacenes de varios pisos.
Los 193 acres en las afueras de Round Rock, Texas, ubicados a unas pocas millas al norte de la próspera ciudad de Austin, podrían usarse para prácticamente cualquier cosa, dadas las indulgentes leyes de uso de la tierra en el estado.
Hace unos tres años, Amazon empezó silenciosamente a buscar propiedades en mercados clave de Estados Unidos, como el sur de California, Texas, Illinois, Florida y el área de la bahía de San Francisco. Entre 2020 y 2022, la compañía triplicó la cantidad de espacio industrial construido que posee en América del Norte, según documentos internos.
A veces, Amazon compra edificios existentes, como centros telefónicos desaparecidos, pero también adquirió alrededor de 4,000 acres de terrenos baldíos en el mismo periodo, según el investigador de bienes raíces Costa Cruz.
Amazon planea usar gran parte de los bienes raíces para una nueva generación de imponentes centros de distribución que pueden almacenar una amplia variedad de productos cerca de los clientes en áreas pobladas, según personas familiarizadas con la estrategia.
La compra de terrenos es un cambio importante para Amazon, que históricamente se basó en un puñado de desarrolladores para encontrar propiedades, construir almacenes bastante simples y alquilarlos a la empresa.
Ahora, la compañía fundad por Jeff Bezos está participando cada vez más en el proceso de desarrollo internamente, a menudo compitiendo contra socios de larga data por el mejor espacio.
La compañía también construyó en exceso durante la pandemia y tiene demasiado espacio en el almacén, ahora que el aumento de las compras en línea se ha desacelerado.
‘Como todas las empresas, nos estamos adaptando a la disponibilidad de bienes inmuebles y la ubicación de la demanda de nuestros clientes, y también evaluamos constantemente nuestro enfoque en función de nuestras finanzas’, dijo la portavoz Kelly Nantel en un comunicado.
Si Amazon no sigue acercándose a los clientes ahora, podría renunciar permanentemente a esa proximidad a competidores minoristas como Walmart, que se encuentra a poca distancia en auto.
Amazon ha gastado al menos 2,200 millones de dólares en la adquisición de terrenos o propiedades programadas para remodelación en los últimos dos años, según CoStar.
En marzo de 2020, la empresa desembolsó 30 millones de dólares por 63 acres en una bulliciosa zona industrial entre San Diego y la frontera de Estados Unidos con México.
Los competidores minoristas como Walmart son dueños de la mayoría de sus tiendas en Estados Unidos, lo que les otorga más control y activos que se aprecian. Una cartera de bienes raíces se puede vender y volver a rentar para ayudar a una empresa a superar los pedidos, sin renunciar al uso de la tierra.
La empresa necesita un espacio industrial cerca de los clientes donde la tierra escasea y la competencia es feroz. Levantar cajas de terrenos baldíos en las afueras rurales ya no funciona.
La pregunta ahora es cómo adaptará Amazon una estrategia de la era del auge a las condiciones económicas actuales.
El crecimiento de las ventas en línea se está desacelerando, las tasas de interés están aumentando y algunos analistas esperan una recesión en los próximos meses. La compañía ya ha reducido la cantidad de nuevos almacenes en varios pisos que planea construir en los próximos años de 40 alrededor de 10, según personas familiarizadas con el tema.
