La Unión Europea acordó seguir un plan de 43,000 millones de euros para impulsar la producción de semiconductores, superando un obstáculo clave en su estrategia para el desarrollo de la industria de alta tecnología.
El acuerdo fue respaldado el miércoles por los embajadores de la UE, según personas cercanas al asunto.
Con esto, se ampliaría el alcance de lo que las plantas de chips se consideran ‘primeras en su tipo’ y califican para ayuda estatal, pero no llega a permitir que todos los chips automotrices califiquen para los fondos, que algunos países habían exigido a principios de este otoño.
La última versión también agrega más garantías para cuando el brazo ejecutivo de la UE pueda desencadenar una emergencia e intervenir en las cadenas de suministro de las empresas.
Uno de los temas más polémicos ha sido el uso de los fondos de la UE. Los estados miembros acordaron el miércoles no reasignar 400 millones de euros de fondos de investigación para semiconductores, después de que los países con pequeñas industrias de chips expresaron su preocupación de que ese dinero solo beneficiará a países grandes como Alemania, que tienen operaciones más grandes. Los embajadores quieren que la comisión busque fondos en otra parte.
Se espera que los ministros de la UE aprueben el acuerdo del miércoles en una reunión el próximo mes. El Parlamento Europeo debe aprobar su propio plan antes de que las tres instituciones pueden negociar un acuerdo final.
La UE tiene el ambicioso objetivo de producir el 20% de los semiconductores del mundo para 2030. La Comisión Europea anunció un plan, denominado Ley de chips de la UE a principios de este año, que anticipa que alrededor de 43,000 millones de euros se destinan a la industria de los semiconductores en el continente, incluida la investigación y producción.
Si bien el plan no se finalizará hasta el próximo año, varias empresas ya han anunciado nuevos sitios de fabricación de semiconductores, incluidos Intel, GlobalFoundries, STMicroelectronics, NV e Infeneon Technologies AG.