Intel experimentó resultados mixtos en el transcurso del año. Durante el primer semestre, sufrió una pérdida de 1,277 millones de dólares, sin embargo, en el segundo trimestre logró volver a los beneficios, superando las expectativas del mercado.
Aunque tuvo un beneficio neto de 1,481 millones de dólares en el último trimestre, aún no ha logrado compensar completamente las pérdidas del primer trimestre, que ascendieron a 2,758 millones de dólares.
El trimestre más reciente ha sido una mejora significativa para la empresa estadounidense, ya que generó ingresos por 12,949 millones de dólares, aunque fue un 15% menos que el mismo período del año anterior. A pesar de ello, este resultado fue mejor de lo esperado por los inversionistas, lo que llevó a un aumento del 5% en el valor de las acciones en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de Wall Street.
Los analistas atribuyen la disminución en la facturación de Intel a la caída en las ventas de computadoras y otros equipos informáticos, después de que hubiera un aumento considerable durante la pandemia.
Sin embargo, en una nota positiva, Intel proyecta mejorar aún más las ventas en los próximos meses y destaca que está bien posicionado para aprovechar el crecimiento significativo en el área de la inteligencia artificial. Se espera que este sector experimente un aumento considerable, lo que beneficiará a la empresa tecnológica.
A pesar de los altibajos, las acciones de Intel han experimentado un incremento del 29% en Wall Street en lo que va del año. Aunque todavía se encuentran lejos de sus máximos históricos, la compañía se mantiene optimista respecto a sus perspectivas futuras.