El notable aumento en el valor de las acciones ha posicionado a Nvidia entre las tres empresas más valiosas del mundo, sustentado en varias suposiciones.
Una de ellas es que las aplicaciones de inteligencia artificial (IA) habilitadas por sus semiconductores se convertirán en elementos clave de la economía moderna.
Otra suposición es que la compañía, junto con su red de contratistas, podrá satisfacer la creciente demanda de sus productos sin problemas.
A pesar de los altibajos en el entusiasmo por la inteligencia artificial, Nvidia sigue siendo el líder en la venta de herramientas esenciales para esta ‘fiebre del oro’ de la IA.
Los ingresos de la compañía siguen en ascenso, y su lista de pedidos para los chips Hopper y su sucesor, Blackwell, está completa. Sus acciones se han recuperado del mínimo alcanzado en agosto, y se prevé que los ingresos se dupliquen este año, manteniendo un crecimiento similar al de 2023. A menos que ocurra un colapso inesperado en el mercado, Nvidia cerrará el año como el fabricante de chips más valioso del mundo por un amplio margen.
Entre los chips de Nvidia, el gran generador de ingresos actual es el Hopper H100, que rinde homenaje a la pionera de la informática, Grace Hopper. Esta es una versión más potente de una unidad de procesamiento gráfico (GPU) que normalmente se encuentra en las computadoras personales y mejora la experiencia visual de los videojuegos. Sin embargo, está siendo reemplazada por la gama Blackwell.
Tanto Hopper como Blackwell incluyen tecnologías que convierten grupos de chips de Nvidia en unidades únicas capaces de procesar grandes volúmenes de datos a alta velocidad, haciéndolos ideales para las tareas intensivas de entrenamiento de redes neuronales que sustentan la última generación de productos de IA.
Con sede en Santa Clara, California, Nvidia venderá los chips Blackwell en diversas configuraciones, incluyendo como parte del superchip GB200, que combina dos GPUs Blackwell con una CPU Grace, una unidad de procesamiento central de propósito general.
¿Qué hace especiales a los chips de Nvidia?
Lo que hace especiales a los chips de Nvidia es que las plataformas generativas aprenden tareas como traducir textos, resumir informes y sintetizar imágenes al procesar grandes cantidades de material preexistente. Cuanto más datos reciben, mejoran en aspectos como el reconocimiento de la voz humana o la redacción de cartas de presentación. Estos sistemas se desarrollan mediante ensayo y error, realizando miles de millones de intentos para alcanzar la perfección, lo que consume enormes cantidades de potencia informática.
Según Nvidia, Blackwell ofrece un rendimiento 2.5 veces superior al de Hopper en el entrenamiento de IA. El nuevo diseño cuenta con tantos transistores (los pequeños interruptores que permiten a los semiconductores procesar información) que es demasiado grande para las técnicas de producción convencionales. En realidad, se trata de dos chips conectados para funcionar como uno solo, según la empresa.
Para los clientes que compiten por entrenar sus plataformas de IA en nuevas tareas, la ventaja de rendimiento que ofrecen los chips Hopper y Blackwell es crucial. Estos componentes son tan esenciales para el desarrollo de IA que el gobierno de EU ha restringido su venta a China. Ninguno de los rivales de Nvidia ha logrado igualar el avance que, según la compañía, ofrecerá Blackwell.
La ventaja de Nvidia no radica solo en el rendimiento de su hardware, sino también en su invención de CUDA, un lenguaje para sus chips gráficos que permite programar aplicaciones de IA. El uso generalizado de esta herramienta de software ha ayudado a mantener a la industria atada al hardware de Nvidia.
