Los presidentes de Cofetel y la CRE señalan que el marco jurídico es el que impide la falta de resultados en materia de competencia; por su parte, la Comisión Federal de Competencia aclaró que si México pretende competir con el exterior será indispensable modificar la estructura institucional regulatoria.
Para que los organismos reguladores sean promotores de la competencia en México, se demanda una mayor autonomía para ellos, coincidieron sus titulares.
El presidente de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), Francisco Salazar Diez de Sollano, dijo que el marco jurídico al que están sujetos no establece con claridad el ámbito de acción en el que pueden actuar, lo que limita su competencia.
“Lo que es importante destacar es que esta falta de acción no es un problema de los organismos reguladores, sino del marco jurídico. No establece con claridad en todos lo ámbitos de competencia para que sean más efectivos y por lo tanto, no es un problema de voluntad de los reguladores”, sostuvo.
El director del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), Roberto Newell, dijo ayer en un foro que México camina en sentido contrario al esquema de regulación internacional y que se encuentra supeditado a las decisiones del Poder Ejecutivo, lo que limita sus resultados.
Destacó los casos de las comisiones Reguladora de Energía y Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) las cuales no responden a su misión.
El presidente de la CRE mencionó que no le preocupa que los organismos reguladores sean parte del Poder Ejecutivo, siempre y cuando se haga una separación clara. “Pero el marco jurídico al que estamos sometidos no establece las condiciones para que haya una amplia competencia y la impide”, agregó.
Recordó que organismos como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) tienen ya un mecanismo que les permite tener recursos para su financiamiento y gastos operativos por medio de los cobros de los servicios de regulación y supervisión que ofrecen.
Proponen reformas de ley
A su vez, Héctor Osuna, presidente de la Cofetel, explicó que particularmente en el sector telecomunicaciones para que se logré una eficiente regulación y se deje atrás la endeble función de la comisión que preside, se debe promover una modificación de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Esto, con el fin de que se permita que las concesiones se deleguen del Ejecutivo a la Cofetel, de lo contrario “mientras eso no cambie, las responsabilidades continuarán recayendo en la SCT y no podremos evitar la doble ventanilla”.
“Históricamente si ha habido una parálisis en la toma de decisiones, pero buscamos cambiar esa imagen”, dijo.
El exsenador panista, explicó que aún cuando ha sido cuestionada la autonomía de la Cofetel, el nuevo pleno trabaja en la integración del reglamento interior, mismo que dijo, ya está en proceso de revisión, y con ello lo que se tratará es acotar la doble ventanilla, pues “así se simplificarán procesos en beneficio tanto de la industria, como de los usuarios”.
El hecho de que las responsabilidades y atribuciones del sector pertenezcan a dos entes, Cofetel y SCT, no debería representar un obstáculo, cuando se trabaja en conjunto, sin embargo, “es imperiosa la eficiente y oportuna toma de decisiones con visión al futuro”.
Osuna Jaime aseveró que los entes reguladores no deben desviar su función para lo que fueron creados, por lo que dijo “hay que buscar el enfoque que mejor beneficie al consumidor. Por nuestra parte necesitamos dar seguridad y confianza al usuario”, aunque externó que “estamos conscientes que nos falta personalidad lo que proyecte”.
Cambios, indispensables para competir
Eduardo Pérez Mota, presidente de la Comisión Federal de Competencia (CFC), dijo que para que los órganos reguladores surtan efectos es indispensable, además de dotarlos de autonomía, que tengan coherencia con la regulación y rindan cuentas al Congreso de la Unión y al Sistema Judicial.
Reconoció que la regulación administrativa inhibe la productividad del país, de modo que si México pretende competir en el exterior será necesario modificar la estructura institucional de los entes reguladores, en donde se les otorguen mayores facultades para obligar a las instituciones de gobierno a proteger al consumidor.
“La autonomía se fortalece con inamovilidad e independencia presupuestal; la coherencia requiere mayores facultades para los reguladores horizontales y; la rendición de cuentas mejora con mecanismos de consulta y vigilancia”, sostuvo.
Si México pretende competir en el exterior será necesario modificar la estructura institucional de los entes reguladores… Eduardo Pérez Motta, presidente de la CFC
Lo que es importante destacar es que esta falta de acción no es un problema de los organismos reguladores, sino el marco jurídico… Francisco Salazar, presidente de la CRE
Sí hace falta mayor capacidades y facultades y dientes en el tema regulatorio… Héctor Osuna, presidente de la Cofetel
Fuente: El Economista