La operadora brasileña de telefonía móvil y fija Oi registró pérdidas por 220.9 millones de reales (unos 96.8 millones de dólares) en el segundo trimestre del año. Este es el primer balance trimestral que la compañía presenta después de la fusión con Portugal Telecom.
No obstante, en la comparación con el segundo trimestre de 2013 y sin tener en cuenta el aumento de capital por parte de Portugal Telecom, las pérdidas aumentaron un 77.8%.
El beneficio bruto de explotación Ebitda fue por unos 1.117 millones de dólares, que representa un retroceso del 21.3% frente a los meses de abril, mayo y junio del año pasado.
La facturación neta llegó en el trimestre a los 9,020 millones de reales (unos 3,952 millones de dólares), un incremento del 0.04%, favorecido por la apreciación del euro frente al real.
Teniendo en cuenta sólo los negocios en Brasil, la facturación neta fue de 6,935 millones de reales (unos 3,039 millones de dólares), un 2,0 % menos que en los mismos meses de 2013.
Los números en Brasil se vieron influenciados por la reducción de tarifas reguladas, la caída del número de suscriptores de telefonía fija (-7.2%) y un menor tráfico de voz y datos durante los días festivos en junio con motivo del Mundial de fútbol.
EFE
