Sony anunció hoy que prevé registrar pérdidas por 1,656 millones de euros durante el ejercicio en curso, casi cinco veces más que su estimación inicial.
El motivo de la revisión a la baja es el deterioro de sus activos incluido dentro de su plan empresarial para el área de telefonía móvil durante el período julio-septiembre, el segundo trimestre del año fiscal japonés, según explicó el presidente de la empresa, Kazuo Hirai.
Con base en estas previsiones, la compañía planea recortar en un 15% su plantilla de dicha área de negocio durante 2014, lo que supondría el despido de un millar de empleados de los aproximadamente 7,100 que tiene en todo el mundo.
La nueva estimación contempla que el valor económico de su negocio sea sensiblemente inferior debido a cambios significativos en el mercado y al complicado entorno del negocio de los teléfonos móviles, con competidores como las empresas chinas, explicó Hirai. ‘Nuestro plan inicial contemplaba expandirnos en el mercado, pero al ver lo difícil de la situación, vamos a buscar la rentabilidad y la estabilidad en el sector’.
Además, Sony prevé no repartir dividendos a sus accionistas en el ejercicio en curso, lo que supondría la primera vez que deja de distribuir ganancias desde que salió a bolsa en 1958. Se trataría del segundo año consecutivo de pérdidas para Sony tras su déficit neto de 128,400 millones de yenes (924 millones de euros) de 2013.
La compañía nipona, que se encuentra inmersa en un proceso de reestructuración, ha caído en números rojos todos los años desde 2007 con la excepción de 2012.
EFE