La compañía Algar se adjudicó la cuarta de las seis concesiones subastadas, aunque una licencia que no se extiende a todo Brasil, en tanto que ninguna compañía presentó oferta por las dos últimas, informó la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel, regulador).
Con ofertas por las licencias prácticamente sin variación con respecto al precio mínimo exigido por la Anatel y la falta de interesados en dos de las concesiones, el Gobierno tan sólo recaudó en la subasta 5,850 millones de reales (unos 2,437.5 millones de dólares), por debajo de los 3,208.3 millones de dólares que esperaba como mínimo.
En la subasta se adjudicaron concesiones para ofrecer telefonía móvil de cuarta generación y acceso a internet en banda ancha las únicas cuatro compañías inscritas.
Las tres mayores operadoras de telefonía móvil de Brasil, que ya ofrecen 4G en otra frecuencia, garantizaron el derecho a operar en los 700 megahercios: Vivo, que es subsidiaria de Telefónica española; TIM, subsidiaria de Telecom Italia, y Claro, subsidiaria de la mexicana América Móvil, de Carlos Slim.
El grupo Algar Telecom, de capital nacional y que opera en los estados de Goiás, Minas Gerais, Mato Grosso do Sul y Sao Paulo, se adjudicó por su parte el derecho a ofrecer 4G en las mismas regiones en las que opera.
La primera concesión subastada se la adjudicó Claro, que ofreció un valor en un 1% superior al mínimo exigido por el Gobierno unos 802.9 millones de dólares.
TIM obtuvo la segunda licencia con una oferta igualmente en un 1% superior al mínimo impuesto por la Anatel y Vivo se adjudicó la tercera de las concesiones con extensión nacional con exactamente el precio mínimo.
Algar pagó 29,567,000 reales (unos 12.3 millones de dólares), un precio tan sólo en 7,000 reales (unos 2,916.7 dólares) superior al mínimo establecido.
La frecuencia de 700 megahercios es utilizada actualmente por los canales de televisión que todavía operan con sistemas analógicos, pero que en los próximos años tendrán que digitalizar sus transmisiones.
La utilización plena de esa frecuencia por parte de las empresas que se adjudicaron las concesiones este martes tan sólo está prevista para 2019, cuando la banda quede totalmente liberada.
Las operadoras que actualmente ofrecen 4G en Brasil utilizan la banda de frecuencia de 2.5 GHz, subastada en 2012 y que tiene una cobertura menor.
Las nuevas concesiones permiten a las actuales operadoras elevar su cobertura y reducir costos, ya que, en la frecuencia de 700 megahercios, es posible alcanzar una mayor distancia de señal con menos antenas.
La única de las cuatro grandes operadoras de telefonía móvil de Brasil que se abstuvo de presentar ofertas fue el grupo brasileño Oi, mayor operador de telefonía fija de Brasil y cuyo endeudamiento saltó significativamente en los últimos meses por el proceso para fusionarse con Portugal Telecom.
Además de pagar por las respectivas licencias, las cuatro vencedoras se comprometieron a pagar en conjunto otros 1,500 millones de dólares para financiar las operaciones necesarias para liberar una banda de frecuencia actualmente usada por la televisión analógica.
Con esta operación Brasil buscaba recaudar 4,000 mdd en concesiones de redes 4G.
EFE