La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) calcula que durante 2015 se adquirieron más de 1,000 millones de dispositivos inalámbricos capaces de interconectarse, y se prevé que para 2020 estén conectados entre sí 25,000 millones de estos aparatos.
Además, se estima que la comunicación y el flujo de información entre máquinas pronto superará en gran medida a la información digital generada por las personas.
La capacidad de interconexión de los dispositivos a través de internet podría ser la tecnología que catapulte la transformación de los países en desarrollo y mejore la calidad de vida de sus habitantes, según un informe elaborado por Cisco y la UIT.
De tal forma, computadoras, teléfonos, sensores, chips, por mencionar algunos, podrían mejorar los servicios básicos de salud y educación y permitir que las comunidades prosperen.
Según el documento, el creciente número de dispositivos con conexión a internet capaces de interconectarse -incluso sin intervención humana- puede tener un impacto más que positivo en los países en desarrollo.
La disponibilidad de los dispositivos, que ya son habituales en el mercado, la red de conexión móvil mundial (que alcanza un 95% de cobertura 2G), su bajo costo y su posible adaptabilidad a los países en desarrollo, presentan esta tecnología como una gran apuesta para el futuro.
EFE