El Gobierno de Argentina aprobó hoy un decreto que habilita a las empresas a brindar servicios de cuádruple play, que incluyen internet, televisión por cable y telefonía fija y móvil de manera simultánea.
Con esta medida se busca flexibilizar un sector en que las compañías tenían hasta ahora vetado el ingreso a otros mercados, informaron fuentes oficiales.
A través de un decreto, publicado hoy en el Boletín Oficial, el Ejecutivo de Mauricio Macri abrió el mercado de la telefonía móvil a nuevos operadores –con nuevos criterios para una mayor competencia, según el texto–, amplió el número de frecuencias y autorizó a las empresas de telefonía a brindar servicios de televisión por cable.
Por último, habilitó a las concesionarias de televisión por satélite a prestar internet también por este canal, algo que, según explicó el Ministerio de Comunicaciones, permitirá conectar a las zonas rurales del interior del país que tienen mayores dificultades para acceder a los servicios de cable.
‘Tenemos el compromiso de desarrollar las nuevas tecnologías y que en todo el país haya telefonía móvil de calidad e internet de alta velocidad’, explicó en un comunicado el titular de la cartera, Oscar Aguad, quien afirmó que, con este decreto, el presidente ‘creó las condiciones para que Argentina avance’.
Aunque el decreto permite la entrada de nuevos competidores en el mercado de la telefonía móvil y de televisión por cable, vetó la acción de todos ellos en las localidades de menos de 80,000 habitantes, donde hay una amplia red de cooperativas y pequeñas y medianas empresas que prestan estos servicios.
‘Impulsa las inversiones en el interior del país por medio de la protección de los prestadores en localidades de menos de 80,000 habitantes. Esas localidades donde solo las pymes invierten y deben tener previsibilidad’, dijo el ministerio sobre ese apartado.
Con estas reformas, se abre la posibilidad de que una misma empresa pueda prestar de forma simultánea servicios de televisión por cable, telefonía fija y móvil e internet, aunque el decreto establece que ninguno de los actores podrá impedir a los usuarios contratar cada uno de los servicios de forma individual.
Así, las empresas podrán ofertar paquetes con los cuatro servicios, pero antes deberán informar al Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) del valor de los descuentos aplicados a quienes contraten todos los servicios de forma conjunta y del precio separado de cada uno de los productos.
El decreto determina que será el Enacom quien administre el concurso público para la asignación de las nuevas frecuencias a los diferentes operadores de telefonía móvil, una subasta que se realizará en un plazo máximo de seis meses.
Con esta medida, el Gobierno pretende regular los intereses de las grandes empresas del sector, como Telecom, Telefónica, Claro y el Grupo Clarín, que es dueño de la empresa de televisión por cable e internet Cablevisión y que persigue, a través de la telefónica Nextel, convertirse en el cuarto operador móvil del país.
Todas ellas pedían desde hace tiempo ingresar a nuevos mercados que hasta ahora les estaban vedados.
EFE
