ZTE anunció pérdidas netas de 342.3 millones de dólares en 2016 debido a la sanción que deberá pagar al Gobierno de Estados Unidos por violar la prohibición de exportaciones a Irán.
La compañía cerró un acuerdo este mes con el Ejecutivo estadounidense por el que pagará una multa de 892 millones de dólares, que podrían aumentar hasta 1,192 millones de dólares en caso de que no respetara los términos del pacto a lo largo de los próximos siete años.
La compañía china de telecomunicaciones fue investigada por presuntos contratos entre 2010 y 2013 con la mayor firma telefónica iraní, TCI, para el envío de material de software y hardware de conocidas firmas estadounidenses como Microsoft o IBM valorado en varios millones de dólares, pese a que en 2013 prometió a Washington que dejaría de hacerlo.
A pesar de esta sanción, la facturación de la compañía creció en 2016 un 1.04% hasta 14,700 millones de dólares y su beneficio operativo se disparó un 263.65% hasta alcanzar los 169,3 millones de dólares.
De hecho, según la cuenta de resultados presentada hoy por ZTE, de no ser por las sanciones estadounidenses habrían elevado su beneficio neto a 556.1 millones de dólares, es decir, un 19.2% más que en 2015.
Los ingresos de ZTE en el mercado doméstico representaron un 57.8% de su facturación total y ascendieron a 8,502 millones de dólares, principalmente debido a la expansión geográfica de la cobertura 4G.
Por su parte, la actividad internacional de la empresa le reportó 6,197 millones de dólares, equivalente al 42.2% restante de sus ingresos, afianzando su apuesta por los principales mercados y las compañías telefónicas líderes.
Las ventas de móviles, tablets y otros dispositivos, que representan un tercio de los ingresos de ZTE, aumentaron un 3.02% hasta 4,857 millones de dólares.
El valor total de los activos de la compañía aumentó un 13,47 % hasta 20,565 millones de dólares.
EFE
