Tras un periodo de prueba de un par de meses, Twitter extendió a 280 caracteres el límite que los usuarios ahora pueden utilizar en sus publicaciones.
Esta nueva opción está disponible en casi todos los idiomas, excepto japonés, coreano y chino, que continuarán teniendo como límite los 140 caracteres debido a la naturaleza de sus idiomas, que emplean pocos signos.
Históricamente, el 5% de los tuits en español llegan al límite de caracteres, lo que implica un desafío en la redacción para adaptar un mensaje en este breve espacio, dando como resultado en algunos casos, según Twitter, en un mayor tiempo de edición e incluso, en el abandono de los tuits antes de ser enviados.
Con la ampliación de la cantidad de caracteres, ese porcentaje disminuyó a sólo el 0.8% de los tuits que se encontraban en el límite.