Las negociaciones entre China y Estados Unidos se rompieron la semana pasada cuando Donald Trump exigió al gigante asiático que reduzca el apoyo de las industrias de alta tecnología.
Liu He, viceprimer ministro que supervisa economía y finanzas en China, dijo el jueves a un grupo de funcionarios que Pekín había rechazado una solicitud de Estados Unidos para dejar de subsidiar industrias relacionadas con su iniciativa ‘Made en China 2025’, dijo una persona cercana al tema.
Estados Unidos acusó a China de utilizar la política para obligar a las empresas a transferir tecnología en áreas como la robótica, la industria aeroespacial y la inteligencia artificial.
Las demandas de Estados Unidos surgieron después de que Pekín ofreció reducir el déficit comercial en 50,000 millones de dólares, incluyendo la importación de más gas natural licuado, productos agrícolas, semiconductores y artículos de lujo, según la fuente.
Los planes también incluyeron la apertura del sector financiero a un ritmo más rápido y el acceso a las empresas de Estados Unidos al creciente mercado de comercio electrónico de China, agregó la persona cercana a este tema.
La administración de Trump se ha unificado en la visión de que los empleos en Estados Unidos estaban en peligro, por lo que llamó a las transferencias forzadas de tecnología de China y el robo de propiedad intelectual dirigido por el Estado, dijo un funcionario de La Casa Blanca.
China está considerando ofrecer importantes concesiones en comercio e inversión a la Unión Europea y países como Japón y México. Estados Unidos está involucrado actualmente en disputas comerciales con estas economías.