Xiaomi presentó hoy en París el primer smartphone de su nueva marca Pocophone, el modelo F1.
Con este nuevo dispositivo, que se ofrece a un precio por debajo de los 400 euros, la compañía pretende ganar terreno a gigantes de la telefonía como Samsung, Apple y Huawei.
El Pocophone F1 cuenta con procesador Snapdragon 845, memoria RAM de 6 u 8 GB y almacenamiento interno que va desde los 64 hasta los 256 GB.
Según las características elegidas por el usuario, el precio en el mercado europeo variará desde los 329 euros hasta los 369 euros, en sus tres diseños con carcasa de policarbonato en negro grafito, azul acero o rojo pasión, en lugar del cristal con el que muchas compañías construyen ahora sus celulares.
Para los clientes que busquen un material más resistente, Pocophone también podrán optar una edición ‘armoured’ en negro, a partir de kevlar.
‘No queríamos hacer otro teléfono de cristal, por eso lanzamos esta versión con kevlar, la misma fibra que se usa en la elaboración de chalecos antibalas. Sabemos que mucha gente quiere poder sentirse orgullosa de su móvil’, dijo Jai Mani, jefe de producto de Pocophone Global.
Segun Mani, el dispositivo mejora sensiblemente su rendimiento gráfico y dispone de una batería que alcanza los 4,000 mAh, de larga autonomía, la misma que usa, por ejemplo, el Huawei P20 Pro, y superior a la del Samsung Galaxy S9.
El equipo de Pocophone, formado por ocho expertos, incorpora también el sistema de refrigeración LiquidCool Technology, para impedir el calentamiento del procesador.
Cuenta con una cámara trasera dual de 12 y 5 megapíxeles y una delantera de 20, gracias al trabajo de los equipos de Xiaomi que han introducido sus últimas mejoras al sistema fotográfico del F1.
Dos de sus principales características técnicas consisten en un sistema de desbloqueo facial que reconoce al usuario incluso en la oscuridad y un inicio intuitivo, que permite buscar las aplicaciones rápidamente también por colores.
Pocophone F1 estará a la venta en Europa a partir del 30 de agosto.