Las compañías tecnológicas de China se alejan del foco de atención en el CES 2019, que comenzó este domingo, donde se mostraría la influencia y el poder de expansión del sector tecnológico en rápido crecimiento del gigante asiático.
Algunas firmas ajustan su presencia en medio del aumento de las preocupaciones de seguridad nacional de Estados Unidos hacia la tecnología china, y una guerra comercial transpacífica lanzada por el presidente Donald Trump.
Hay menos empresarios chinos que compran espacio en la feria CES para mostrar su última tecnología: 20% menos de expositores que el año pasado, según los números de registro rastreados por el South China Morning Post.
Las firmas chinas siguen representando más de una cuarta parte de los 4,500 expositores de la conferencia, superado solo por Estados Unidos.
Tanto la compañía de internet Baidu, como el gigante del comercio electrónico Alibaba, están teniendo una presencia más moderada, he incluso Xiaomi, el fabricante de teléfonos, simplemente no asistió al evento de este año.
Estados Unidos y China han impuesto gravámenes de importación por cientos de miles de millones de dólares a los bienes de cada uno, y Trump ha amenazado con que se avecinan tarifas que podrían hacer que dispositivos como los iPhone sean más caros en Estados Unidos.
También están explorando nuevas restricciones a la exportación, que apuntarían a industrias en las que China espera salir adelante, como la inteligencia artificial y la robótica.
En un mundo ideal, las industrias tecnológicas en los dos países se verían como complementarias, dijo el capitalista de riesgo Kai-Fu Lee, quien dirigió la filial de Google en China antes de que la compañía se retirara por censura y otras preocupaciones.
‘La fortaleza de Estados Unidos son los tecnólogos profundos, las universidades, los académicos, las personas con experiencia superior. La superioridad de China es un mercado más grande, más datos y empresarios muy tenaces y trabajadores’, dijo Kai-Fu Lee.
Lee agregó que su optimismo por un enfoque más colaborativo es por ahora ‘simplemente un sueño’, debido al empeoramiento de la disputa comercial. Pero dijo que todavía podría haber asociaciones entre empresas estadounidenses y chinas, que por ahora atienden principalmente a los consumidores chinos.
