«No se cambió nada»; analiza estrategias jurídicas.
La compañía de telecomunicaciones Alestra se sumó ayer a los reclamos y desacuerdos expresados por la industria respecto de la resolución en la que la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) fijó nuevas tarifas de interconexión para el sistema celular «el que llama paga» nacional.
La empresa dio a conocer que con la determinación de la Cofetel de reducir la tarifa que pagan las telefónicas del servicio fijo a las del celular de 1.54 a 1.23 pesos y autorizar un sobreprecio de 25 por ciento, «en realidad no se cambió nada».
Debido a lo anterior, señaló que su departamento jurídico ya analiza la estrategia legal a seguir, especialmente porque las compañías celulares sólo pagan 0.11 centavos por minuto de interconexión a las empresas del servicio fijo.
Al igual que Avantel, Alestra exteriorizó su desacuerdo con la Cofetel, organismo que anunció que con esa medida se terminaba con los desacuerdos entre empresas del servicio fijo de telefonía y las compañías celulares.
Alestra argumentó que la tarifa de interconexión debe ser de la mitad de la tarifa más baja que las compañías cobran, por minuto, a sus clientes. Dependiendo de los diversos paquetes, la tarifa más baja es de un peso, por lo que la tarifa de interconexión, según esta empresa de servicio fijo, debería ser de 0.50 centavos.
Sin embargo, la Cofetel determinó que el ajuste será de 1.54 pesos que pagan las empresas fijas a las celulares, a 1.23, a partir de octubre, para mantener reducciones paulatinas en los siguientes años.
No obstante, las empresas celulares redondean en minutos los cobros que realizan a las fijas, lo que les arroja un ingreso adicional de 30 por ciento.
Por lo anterior, la Cofetel determinó que el sobrecargo debe ser de sólo 25 por ciento, lo que implica reducir en sólo 5 por ciento ese ingreso adicional, además de que los cálculos deberán realizarse sobre segundos y ya no con base en el redondeo en minutos.
Por ello, de acuerdo con Alestra, se elimina la reducción de la tarifa de interconexión y se compensa mediante el sobrecargo de 25 por ciento; de ahí que, señaló, los precios quedan, en realidad, sin modificación.
El argumento de la Cofetel es que una reducción brusca de las tarifas afectaría los planes de inversión ya contemplados por las compañías celulares, por lo que determinó que la reducción y, por lo tanto, eliminar la distorsión tarifaria entre empresas fijas y móviles, debe ser de manera paulatina.
Fuente: El Financiero, José de Jesús Guadarrama H.
