Apple declaró que la demanda antimonopolio del gobierno de Estados Unidos, que acusa al gigante tecnológico de monopolizar el mercado de teléfonos inteligentes,’no tiene relación con la realidad’ y debería ser desestimada por un juez federal.
En una presentación ante el tribunal, la compañía negó las acusaciones de monopolio y afirmó que no está obligada a dar a los desarrolladores de software más acceso a los iPhones del que ya tienen actualmente.
Apple argumentó que ha establecido los términos de acceso a su propia plataforma y tecnologías, pero que no ha interferido ni restringido a terceros en sus tratos con rivales en el mercado de teléfonos inteligentes.
Esas acciones no pueden ser impugnadas bajo la ley antimonopolio de Estados Unidos, agregó la firma californiana.
La demanda tampoco demuestra que la conducta de Apple haya perjudicado a los consumidores, un componente clave en los casos antimonopolio, añadió.