Los ataques de ransomware han experimentado un alarmante incremento del 37%, según los recientes informes de Check Point Research.
Además, las demandas de rescate ahora superan los 5 millones de dólares, destacando la creciente gravedad de esta amenaza.
En los últimos meses, los sectores más vulnerables a estos ataques cibernéticos han sido la educación, el gobierno/militar y la salud.
Comparativamente, el año pasado, los gobiernos se enfrentaban a una demanda promedio de rescate de 2.07 millones de dólares.
El rápido aumento de esta cifra subraya el impacto significativo que estos ataques están teniendo en infraestructuras críticas.
En este contexto, es imperativo que las empresas se preparen proactivamente para hacer frente al ransomware y limitar su impacto.
Una de las mejores estrategias es llevar a cabo simulacros, donde los miembros del equipo aprenden cómo responder a un ataque según sus roles asignados.
Estos simulacros preventivos se presentan como una estrategia clave para la preparación efectiva contra el ransomware, y para maximizar su eficacia, Check Point sugiere cinco puntos fundamentales:
- Educación de base
- Crear un ambiente de colaboración
- Crear un ‘ataque’ realista
- Variaciones del escenario
- Evaluación final
