ZTE tuvo una reducción en su beneficio neto en 2020 de 17.25% hasta los 4,260 millones de yuanes (655.5 millones de dólares) debido a la ausencia de ingresos extraordinarios, informó la compañía en un comunicado.
Sin embargo, aclaró que, excluyendo los efectos de elementos extraordinarios, sus beneficios se habrían elevado más de un 113%.
En 2019, la tecnológica china se deshizo de activos y obtuvo un ingreso extraordinario de unos 2,660 millones de yuanes (409.3 millones de dólares).
En 2020, la facturación derivada de las operaciones de ZTE creció un 11.8% hasta los 101,451 millones de yuanes (15,609 millones de dólares).
La compañía destacó que, pese al impacto de la pandemia, consiguió una expansión vigorosa de su negocio que le reportó aumentos de ingresos tanto en el mercado doméstico como en el internacional.
En 2020, los activos de ZTE crecieron más (+6,7%) de lo que lo hicieron las deudas (+1,2%), lo que supone que la ratio entre ambas partes pasara del 50.3% hasta el 44.2%.
Para 2021, la firma china asegura que seguirá apostando por las redes 5G, con especial énfasis en el mercado chino mientras mantiene prudencia en sus operaciones en el exterior.
ZTE sufrió en los últimos años debido a que, en 2017, Estados Unidos le impuso sanciones asegurando que había mantenido negocios con Corea del Norte e Irán de manera ilegal.