El aumento en el uso de smartphones ha provocado que los ciberdelincuentes desarrollen malware financiero no sólo para atacar computadoras de escritorio sino también para vulnerar dispositivos móviles con Android.
En vista de que este sistema operativo propiedad de Google cuenta con una cuota de mercado de 80%, el número de programas maliciosos para Android crece en paralelo.
En el segundo semestre de 2014, la firma de seguridad G Data analizó 796,933 nuevos programas maliciosos, es decir, casi 4,500 al día.
Además, durante todo el año fueron analizados más de 1.5 millones de nuevos programas maliciosos dirigidos a Android, un 30% más que los registrados en 2013.
Adicionalmente, el número de apps maliciosas para este sistema operativo ha crecido 6.1% respecto a la primera mitad de 2014.
Tiendas alternativas de apps, la mayor fuente de peligro
Las tiendas alternativas de apps son el camino más habitual para la distribución del malware. Al analizar varios de estos mercados alternativos a Google Play se ha descubierto que aquellos de origen europeo o americano acumulan menos apps maliciosas que los de origen ruso y chino.
En algunos mercados de estos últimos, hasta 25% de las apps estaban infectadas con malware o PUPs (Programas Potencialmente no deseados).
Tres predicciones sobre movilidad
Anuncios y espionaje: El adware Superfish ha demostrado que el cifrado SSL puede ser ineficaz y que los cibercriminales pueden aprovecharlo para espiar los datos sensibles que los usuarios guardan en sus computadoras. Esta amenaza podría cambiar de plataforma y extenderse a los dispositivos móviles.
Banca online, en el punto de mira: 2015 será un año donde crecerá el malware específicamente diseñado para robar datos bancarios y financieros y los cibercriminales confiarán en apps bancarias falsas o manipuladas para conseguir estos datos. Verificar las apps descargadas con un antivirus será cada vez más necesario.
El ‘yo cuantificado’, otro motivo de interés para los cibercriminales: Hay centenares de gadgets y apps vinculadas a la medición de datos relacionados con la salud, alimentación y registro de todo tipo de actividades cotidianas que almacenan y analizan un volumen de datos ingente sobre sus usuarios en smartphones y tablets. Por cuestiones de privacidad, es importante observar la popularización de estos dispositivos con cierta reserva y tomar en cuenta que el robo de todos estos datos comenzará a situarse en la mira de los cibercriminales.
Fuente: G Data