Nintendo experimentó una caída del 55.3% en su beneficio neto entre abril y junio, hasta 80,954 millones de yenes (unos 502.5 millones de euros), debido a la reducción en las ventas de consolas y juegos de la plataforma Switch.
El beneficio operativo de la compañía, con sede en Kioto, se redujo un 70.6% en dicho período, primer trimestre de su ejercicio fiscal, hasta 54,510 millones de yenes (aproximadamente 338.7 millones de euros), según su informe financiero publicado este viernes.
La facturación por ventas de Nintendo disminuyó en los mencionados tres meses un 46.5%, hasta 246,638 millones de yenes (unos 1,333 millones de euros), a pesar de la continua debilidad del yen, debido a una disminución interanual en las ventas unitarias tanto de hardware como de software de Nintendo Switch, mientras se espera el anuncio de su sucesora en los próximos meses.
Las ventas de consolas de la familia Switch cayeron un 46.3% interanual, hasta 2.1 millones de unidades entre abril y junio, mientras que la comercialización de copias de juegos para estas consolas se redujo un 41.3%, hasta 30.64 millones.
‘Durante el primer trimestre del año fiscal anterior, las ventas unitarias tanto de hardware como de software fueron extremadamente altas para un primer trimestre, cuando Super Mario Bros.: La película, impulsó nuestro negocio de videoconsolas y se lanzó The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, junto con hardware especialmente diseñado basado en ese título’, destacó la empresa.
‘No hubo factores especiales de este tipo en el primer trimestre de este ejercicio fiscal y ahora que Nintendo Switch está en su octavo año desde su lanzamiento, las ventas unitarias tanto de hardware como de software disminuyeron significativamente en comparación con el año anterior’, añadió la desarrolladora.
La desaparición del impacto positivo del filme de Mario llevó, además, a que las ventas del área de juegos para móviles y gestión de propiedad intelectual de la empresa cayeran un 53.8%.
El número de jugadores activos en sus consolas Switch se sitúa, no obstante, en su mejor nivel, 128 millones entre julio de 2023 y finales de junio de 2024.
Desde su lanzamiento en 2017 y hasta finales del pasado junio, Nintendo había vendido 143.42 millones de unidades de Switch. La empresa tiene previsto ofrecer detalles sobre su nueva consola de sobremesa y sucesora de esta en el actual ejercicio fiscal.
En este escenario, Nintendo optó por mantener su pesimista previsión para la totalidad del ejercicio en curso, que concluirá el 31 de marzo de 2025, en el que espera seguir explotando el atractivo de su actual consola mientras prepara el lanzamiento de la nueva.
En dicho período, la empresa nipona espera embolsarse un beneficio neto de 300,000 millones de yenes (unos 1,864 millones de euros), lo que marcaría una caída del 38.9% interanual, y prevé una ganancia operativa de 400,000 millones de yenes (unos 2,485 millones de euros), un 24.4% menos con respecto al año precedente.
En lo que concierne a sus ventas, estima un retroceso del 19.3% interanual, hasta 1.35 billones de yenes (aproximadamente 8,389 millones de euros).
Las acciones de Nintendo bajaron hoy un 2.34% al cierre de las negociaciones en la Bolsa de Tokio, que tuvo lugar antes de la publicación del informe financiero, en una jornada en la que el selectivo principal Nikkei se desplomó cerca de un 6% tras las importantes caídas entre las tecnológicas por el desplome en Wall Street y el fortalecimiento del yen, que se prevé que merme la facturación de los exportadores nipones.