El principal regulador de internet en China arrancó una campaña de tres meses para combatir el uso inadecuado o malicioso de la inteligencia artificial, una tecnología que ha crecido con fuerza en el país en los últimos meses.
La Comisión Central de Asuntos del Ciberespacio detalló que la iniciativa comenzará con una etapa centrada en reforzar el control sobre las principales fuentes de IA, lo que incluye eliminar aplicaciones no autorizadas.
También se pedirá a las plataformas digitales que mejoren su capacidad para detectar y revisar violaciones a la normativa, además de endurecer la supervisión de los contenidos generados por esta tecnología.
En una segunda etapa, el enfoque estará en combatir usos específicos de la IA, como la creación y difusión de desinformación, contenido obsceno, acoso o suplantación de identidad.
Durante esta fase se eliminarán contenidos considerados ilegales o perjudiciales, y se impondrán sanciones a plataformas y organizaciones que incumplan las reglas.
Nuevos modelos de lenguaje como los desarrollados por DeepSeek, Tencent, Alibaba o Bytedance han generado gran expectativa en China por competir en capacidades con soluciones estadounidenses, pero a menor costo.
Días atrás, el presidente Xi Jinping pidió acelerar el desarrollo de esta tecnología para lograr independencia frente a otros países, especialmente Estados Unidos.
Sin embargo, expertos del sector han expresado dudas sobre el surgimiento simultáneo de tantos servicios en el país, así como sobre su potencial de expansión internacional debido a la censura que aplican las autoridades.
En 2023, China ya había establecido regulaciones para que los servicios de IA respeten los valores socialistas y prohíban la generación de contenidos que puedan afectar la seguridad nacional, la unidad del país o el orden social.