La ventaja de Estados Unidos frente a China en inteligencia artificial podría no ser permanente, según Ruth Porat, presidenta y directora de inversiones de Alphabet.
Durante una entrevista en el foro económico mundial en Davos, Suiza, señaló que mantener esta posición no está garantizado.
Porat destacó que Occidente lleva la delantera en modelos y chips, pero advirtió que China está alcanzando e incluso podría superar en áreas clave como la difusión de capacidades fundamentales.
Esto ocurre en un contexto de crecientes restricciones estadounidenses a la exportación de tecnología avanzada, incluidas limitaciones a la venta de chips de inteligencia artificial, parte de una estrategia para mantener el control tecnológico.
Aunque varios países han expresado interés en colaborar con Washington, Porat subrayó que algunos avanzarán sin Estados Unidos si no se establece una regulación clara y unificada. Reiteró la importancia de crear marcos regulatorios internacionales para evitar un panorama fragmentado que limite la inversión en IA.
Porat también instó a la administración de Donald Trump a adoptar un enfoque ‘audaz y responsable’ en las políticas de desarrollo de IA. En su primer día en el cargo, Trump revocó una orden ejecutiva de la era Biden que imponía requisitos de seguridad y transparencia para desarrolladores de IA, lo que sugiere un enfoque más flexible en esta área.
Mientras tanto, Google continúa invirtiendo significativamente en IA a través de su laboratorio DeepMind. Recientemente lanzó Gemini 2.0, su modelo insignia de inteligencia artificial, como parte de su esfuerzo por mantener el liderazgo frente a competidores como OpenAI.
Sin embargo, Sundar Pichai, CEO de Alphabet, advirtió que los casos antimonopolio en curso en Estados Unidos podrían afectar negativamente el liderazgo tecnológico del país.
La carrera tecnológica entre Estados Unidos y China sigue intensificándose, marcando el rumbo del futuro de la inteligencia artificial y la economía global.