El World Economic Forum lanzó hoy su Reporte Global de Tecnologías de Información, GITR (Global Information Technology Report), el cual analiza cómo los países de América Latina se comparan en 54 indicadores distintos del Índice de Habilidad para la Conectividad, NRI (Networked Readiness Index). El veredicto regional: mientras algunos países han comenzado a expandir su infraestructura de banda ancha, mejorar la conectividad a través de la región sigue siendo una de las mayores barreras para el desarrollo.
Hay éxitos a nivel país, tales como Chile, que clasifica entre el cuartil más alto a nivel global, debido al consistente foco del gobierno en expandir la infraestructura de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC) y estimular su uso. Panamá está rápidamente ascendiendo en las clasificaciones globales y se encuentra a sólo ocho lugares detrás (en el lugar número 43 del mundo), impulsado por el reconocimiento del gobierno de las TIC como críticas impulsoras del crecimiento económico. Y Costa Rica, Uruguay y Colombia merecen reconocimiento por focalizar el esfuerzo en la adopción de las TIC (Internet, teléfonos móviles, y banda ancha) así como de mejorar la asequibilidad de las tecnologías.
Sin embargo, se puede hacer más para acelerar la expansión de las TIC y facilitar el desarrollo económico y social en la región. La reducción en las regulaciones y la burocracia, aumentar las habilidades en TIC de la fuerza laboral y el foco en innovación y espíritu emprendedor son todas áreas que demandan atención.
Pero se necesita un foco particular para abordar dos problemas importantes en América Latina:
1) Expandir la infraestructura de banda ancha para asegurar la conectividad ubicua, particularmente a través de acceso inalámbrico.
Mientras las compañías y los gobiernos en la región han redoblado sus esfuerzos para construir y mejorar la infraestructura de banda ancha, el tiempo que toma hacerlo, el costo de las inversiones alámbrica fijas y los desafíos geográficos de la región apuntan al ancho de banda inalámbrico como la mejor manera de comenzar a llegar a la mayoría de la población que reside en áreas sin acceso. El desafío crítico para la construcción de la infraestructura inalámbrica es el lanzamiento de un espectro de banda de 700 MHz, que es lo más apropiado para suministrar acceso inalámbrico de alta velocidad. América Latina tiene una oportunidad única de acelerar este proceso al avanzar con las subastas de este espectro de banda en el presente año.
2) Transformar la entrega de servicios de gobierno particularmente en educación, atención a la salud y justicia, aprovechando la conectividad y las TIC.
Con un rápido crecimiento económico en la región resultando en un aumento del ingreso per cápita y un ascenso de millones de personas hacia la “clase media”, más ciudadanos latinoamericanos están demandando mejores servicios públicos a sus gobiernos. Los alcaldes de las ciudades pueden aprovechar el poder de las TIC y de la conectividad de banda ancha para mejorar la manera en que se administra el gobierno, se entregan servicios básicos e interactúan con los ciudadanos. Tecnologías de video y colaboración pueden entregar interacciones en tiempo real a lo largo de grandes distancias geográficas; dispositivos embebidos pueden medir las condiciones ambientales para mejorar la administración de los recursos y la provisión de servicios de gobierno electrónico y el acceso a banda ancha juntos permiten una mayor interacción con el gobierno.
Acciones concretas en estas dimensiones ayudarán a las economías de la región a aprovechar las TIC para su desarrollo. Mientras que los mejores 10 entre 148 países en el NRI son países avanzados pequeños, tales como Finlandia, Singapur y Suecia, países mas grandes como Estados Unidos, el Reino Unido y Corea también están presentes. Los países de América Latina han iniciado el proceso de unirse a ellos en el grupo superior de disponibilidad para la conectividad, lo que se necesita ahora es un progreso continuado.
Por Jordi Botifoll, Presidente de Cisco en América Latina