Uno de los ciberataques más graves y costosos sufridos por Estados Unidos, que en mayo afectó a la red de oleoductos Colonial, se podía haber evitado si un empleado de la compañía no hubiera utilizado su contraseña de la compañía para acceder a páginas web, según lo declarado este jueves por su CEO, Joseph Blount.
Blount testificó hoy ante el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes de Estados Unidos junto con Charles Carmakal, vicepresidente de FireEye Mandiant, una empresa especializada en la lucha contra criminales cibernéticos y que está trabajando con Colonial para investigar el ataque e impedir que sufra otros en el futuro.
Blount reconoció que una de las más complejas infraestructuras energéticas de Norteamérica y quizás del mundo y que transporta cada día 378.5 millones de litros de combustibles por sus miles de kilómetros de oleoductos, sufrió el 7 de mayo un ataque cibernético que bloqueó sus sistemas informáticos por la reutilización de una contraseña.
Carmakal, cuya compañía fue contratada por Colonial inmediatamente después de sufrir el ataque, explicó que aunque no se sabe con certeza cómo los criminales lograron el nombre de usuario y la contraseña para acceder al sistema informático de la compañía, lo más probable es que el empleado los usó en otra página web.
La cuenta comprometida, que ha sido eliminada de Colonial, contaba con una contraseña que según explicó Carmakal no era fácil sino compleja pero se había usado en el pasado en otra página web.
El principal directivo de Colonial también admitió que fue él personalmente el que tomó la decisión de pagar el rescate que solicitaron los piratas informáticos, un grupo denominado DarkSide, para liberar los sistemas informáticos de la compañía, que habían quedado encriptados por el ataque.
Colonial pagó algo más de 4 millones de dólares en bitcoin aunque Blount reconoció que, finalmente, Colonial no necesitó la herramienta proporcionada por DarkSide para eliminar el encriptado.
Según explicó Carmakal, la herramienta no hizo falta.
‘El descifrador proporcionado (por DarkSide) funcionó y fue efectivo. Pero la realidad es que no fue necesario para recuperar sistemas y datos porque Colonial fue capaz de volver a funcionar con sus copias de respaldo y procesos de restauración’, indicó.
Pero tanto Blount como Carmakal dijeron que ante la urgencia de la situación y la necesidad de reiniciar el funcionamiento de una pieza de infraestructura básica para el país, la decisión de pagar el rescate solicitado por DarkSide fue la adecuada.
Blount afirmó que pagar a DarkSide los 4.4 millones de dólares fue la decisión más difícil que ha tenido que tomar y también que fue correcta.
Esta semana, el FBI anunció que ha recuperado unos 2.3 millones de dólares del rescate pagado por Colonial aunque Blount señaló que no sabe si la cifra ya ha sido devuelta a la compañía.