Un equipo de investigadores de Corea del Sur creó una cámara con una capacidad de visión que emula la de los ojos de los gatos, permitiendo la visualización en condiciones de baja luminosidad y la detección de objetos camuflados en entornos complejos.
El dispositivo replica dos características fundamentales de los ojos felinos: las pupilas verticales y el tapetum lucidum. Las pupilas verticales ayudan a los gatos a gestionar la luz en diversas condiciones y a reducir el ruido visual, mientras que el tapetum lucidum, una capa reflectante detrás de la retina, incrementa la sensibilidad a la luz al reflejarla.
Min Su Kim, uno de los autores del estudio y investigador en el Instituto de Ciencias Básicas de la Universidad Nacional de Seúl, destaca que ‘la habilidad de los felinos para detectar objetivos camuflados bajo diferentes condiciones de iluminación los diferencia de otros mamíferos’.
El equipo desarrolló una cámara con una pupila vertical artificial, incorporando una abertura en forma de rendija y una matriz semiesférica de fotodetectores de silicio con reflectores de plata. Comparada con una cámara de abertura circular tradicional, la nueva cámara mostró una mejora superior al 10% en precisión de imagen y reconocimiento de objetos en fondos complejos.
A pesar de estos avances, la cámara aún enfrenta limitaciones, como una resolución de píxeles baja y un campo de visión estrecho, similar al de los gatos. Los investigadores planean futuras mejoras, incluyendo la integración de mecanismos que imiten los movimientos de cabeza y los músculos extraoculares felinos para ampliar el área de escaneo.
Este innovador diseño ha demostrado una mejora significativa en comparación con las cámaras utilizadas en vehículos autónomos y drones actuales.