La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos busca la desinversión de Instagram y WhatsApp, al presentar formalmente una demanda antimonopolio contra el gigante tecnológico Facebook, acusándolo de abusar de sus poderes de monopolio en las redes sociales para reprimir la competencia.
Debido a que gran parte del crecimiento en los ingresos de la empresa provienen de Instagram y WhatsApp, resulta fundamental no perder las dos plataformas, ya que se amenazaría con borrar gran parte del valor a largo plazo de Facebook.
Las acciones de la compañía, que se han disparado más del 35% en 2020, cayeron un 4% el miércoles, terminando el día de negociación con una caída de alrededor del 2%.
‘Las rupturas dan miedo a los inversionistas porque de alguna manera podrían alterar los modelos comerciales’, dijo Dan Ives, analista de Wedbush Securities, quien calificó a Instagram como una de las tres mejores adquisiciones comerciales en los últimos 15 años.
Aún así, Ives cree que la posibilidad de una ruptura real es mínima sin cambios legislativos del congreso; él cree que son pocos probables. ‘Es un titular ruidoso, pero no cambia enormemente la situación de Facebook a corto plazo’.
Facebook adquirió estas prometedoras plataformas rivales precisamente porque esperaba que la red social principal se desvaneciera algún día, y quería ser la empresa que decidiera a qué aplicaciones recurriría la gente. Una ruptura desharía la mayor parte de la cobertura de Zuckerberg para el futuro del Facebook, justo cuando sus inmensas inversiones en Instagram y WhatsApp están comenzando a dar sus frutos.
Facebook argumenta que esas inversiones hicieron de Instagram y WhatsApp lo que hoy son.
‘Nuestras adquisiciones de Instagram y WhatsApp han mejorado drásticamente esos servicios y los han ayudado a llegar a mucho más personas’, escribió Zuckerberg en una publicación para los empleados el miércoles. ‘Competimos duro y competimos de forma justa. Estoy orgulloso de eso’.
Facebook se está quedando sin espacios para colocar anuncios en su red social insignia: demasiados anuncios en el feed disminuyen la experiencia del usuario. Por lo tanto, se basan mucho en el potencial de ingresos de las compras.
Este año, la compañía ha creado formas de compra directamente a través de imágenes y videos en Instagram, y ha reunido a empresas de todo el mundo para que usen WhatsApp para comunicarse con los clientes.
Facebook ha trabajado para tejer esas aspiraciones comerciales con su principal red social, al exigir a las empresas que tengan páginas de Facebook para publicar anuncios de Instagram, por ejemplo.
La compañía con sede en Menlo Park, California, también planea eventualmente vincular el chat de WhatsApp con las compras de Instagram. Pero sin esas dos propiedades de las que dependen de las empresas, el camino de Facebook para convertirse en un gigante del comercio electrónico parece mucho más difícil.
El número de usuarios de Facebook ha comenzado a estabilizarse en algunos de sus mercados más valiosos, y la compañía ha estado advirtiendo durante años que el espacio publicitario principal del News Feed está llegando a la saturación. Esto significa que el reciente crecimiento de los ingresos de la empresa ha sido impulsado principalmente por Instagram.
Mientras tanto, WhatsApp prácticamente no genera dinero para Facebook, pero se espera que eso cambie pronto, ya que la compañía hace una gran apuesta en los pagos, el comercio y las herramientas de servicio al cliente para los más de 2,000 millones de usuarios de la aplicación de mensajería. Cualquier ingreso que genere WhatsApp impulsará más el crecimiento de Facebook.
Estrategia internacional
Tanto WhatsApp como Instagram son cruciales para la estrategia internacional de Facebook, ya que ofrecen a la empresa un punto de apoyo sólido en mercados de rápido crecimiento como India y Brasil. En algunos países, WhatsApp o Instagram superan con creces a sus empresa matriz por usuarios.
Si bien Facebook sigue siendo la red social más grande en la mayor parte del mundo, Instagram y WhatsApp le dan a la empresa una huella mucho más grande de la que tendría como servicio independiente.
La pérdida de sus aplicaciones reduciría drásticamente la base total de usuarios de Facebook y, a su vez, sus ingresos.
Facebook no es tan popular como antes entre la generación más joven de usuarios de Internet, en parte porque tiene mucha más competencia para los consumidores de la generación Z. Instagram ha sido el arma secreta de la compañía para evitar Snapchat y, eventualmente podría convertirse en un baluarte contra los videos virales TikTok.
Sin Instagram, Facebook tendría que crear sus propios productos que atraigan el grupo más joven y codiciado de usuarios de Internet, algo que no ha podido hacer recientemente. No hay ninguna señal de que de repente podría hacerlo sin Instagram.
Facebook sería la única empresa en la lucha si finalmente se requieren desinversiones. WhatsApp ha pasado los últimos seis años enfocado no en los ingresos ni las ganancias, sino en el crecimiento de los usuarios, la confiabilidad y el cifrado, una libertad que se le otorgó gracias al sólido de negocio publicitario de Facebook, que pagó las facturas.
WhatsApp está construyendo un negocio, pero no hay garantía de que valga la pena, y sin los bolsillos profundos de Facebook, la plataforma de mensajería instatántea está bajo una mayor presión para ganar dinero.
Por su lado, Instagram depende de Facebook para muchas partes de sus operaciones, incluida la tecnología que impulsa el negocio de la publicidad y la moderación de contenido.
Una escisión de Instagram podría significar la construcción de una plataforma publicitaria completamente nueva y también cortaría el acceso a datos de orientación importante que Instagram obtiene de los perfiles de Facebook de los usuarios, posiblemente siendo que los anuncios en la aplicación sean menos relevantes.