La GSMA calcula que a finales de 2015 había 4,700 millones de suscriptores móviles únicos en todo el mundo, es decir, el 63%.
Más aún, entre 2000 y 2015 la industria se ha beneficiado con el crecimiento acelerado de 1.4 millones de nuevos abonados, sin considerar las conexiones máquina a máquina (M2M), en donde se registran 7,300 millones de conexiones móviles a finales de 2015.
Sin embargo, este crecimiento no es homogéneo, en regiones económicamente desarrolladas, particularmente en Europa y países avanzados de Asia y el pacífico, ya se han alcanzado niveles extremadamente altos de penetración móvil y se encuentran ahora en un punto de saturación. Esto significa que la mayoría de los esperados 1,000 millones en un suscriptores en los próximos cinco años provendrá de los países en desarrollo.
Los mercados de telefonía móvil más grandes del mundo son China e India, de donde vendrá la mayor parte del crecimiento, con un 45% en el número del registrados. El informe pronostica demás que China y Brasil marcarán en el punto de saturación en 2020.
Ante este panorama, el reto actual es asegurar la conexión de pequeñas poblaciones, principalmente rurales y de bajos ingresos que necesitan la colaboración entre los operadores, los gobiernos y otras entidades para evitar que la brecha se amplíe en la telefonía móvil.
Con información de El País
