El grupo Chip 4, formado por Estados Unidos, Corea el Sur, Japón y Taiwán realizaron una videoconferencia en febrero para discutir un sistema de alerta temprana que garantice un suministro constante de chips.
Las partes postergaron las discusiones sobre los controles de exportación y ninguna empresa participó en la reunión, dijo un funcionario.
Taiwán propuso que las cuatro partes intercambien información sobre diferentes partes de la cadena de suministro lo antes posible, Taiwán y Corea del Sur se centrarán en la fabricación, Japón en los materiales y Estados Unidos en su papel como mercado importante.
La reunión se produjo cuando la administración del presidente Joe Biden busca ayudar a sus socios globales para imponer restricciones radicales a la venta de equipos de chips avanzados a China, en una política destinada a evitar el avance del país en una gama de tecnologías de vanguardia, que podrían amenazar el estatus de Estados Unidos como el poder preeminente del mundo.
China, que es el principal socio comercial de Japón, Corea del Sur y Taiwán, ha dicho que el esfuerzo de Estados Unidos mostró su ‘interés hegemónico egoísta’.
Estados Unidos ha logrado un acuerdo con los Países Bajos y Japón para restringir las exportaciones de maquinaria avanzada para la fabricación de chips a China.