Fitbit tiene la idea de desarrollar un smartwatch que sería un dispositivo portátil para niños.
La compañía impulsa nuevas categorías de hardware para alentar la demanda de productos de acondicionamiento físico.
Durante varios meses Fitbit ha estado analizando la factibilidad de este producto, de acuerdo con personas cercanas a este tema.
Basándose en las capacidades de los rastreadores de fitness ahora existentes, se podrían rastrear la ubicación y juegos para involucran a los niños.
La compañía ha estado tratando diversificarse en los últimos años –despliegue de básculas de baño inteligentes, aplicaciones de salud y un nuevo reloj inteligente– ante la competencia de Apple que comenzó a fabricar dispositivos wearables de gama alta y Xiaomi que los produjo más baratos.
James Park, presidente ejecutivo de Fitbit, tiene como objetivo transformar a la empresa del fabricante de su icónica pulsera de rastreo por pasos en un negocio en salud digital, para que a largo plazo pueda ir más allá del hardware y convertirse en un software que pueda ayudar a predecir los resultados de salud para los usuarios.
A principios de este mes, Fitbit invirtió más de 6,000 millones de dólares en Sano, una startup que trabaja en el desarrollo de un parche cutáneo para controlar el azúcar en la sangre.
La necesidad de los padres de dar seguimiento a la salud de los hijos ha provocado una enorme demanda en el mercado de dispositivos para la salud.
Garner estima que el 30% de los envíos totales de smartwatch en 2021 serán generados por dispositivos dirigidos a niños de 2 a 13 años de edad.
Sin embargo, la creciente inquietud de que los niños tengan demasiado acceso a la tecnología, ha dado un lugar a expresiones de preocupación de que los dispositivos inteligentes estén alentando una crisis de salud pública que podría dañar a los niños, tanto así, que en Francia se ha decidido prohibir los teléfonos inteligentes en las escuelas para estudiantes de cierta edad.
Con información de Bloomberg