Google participa en un proyecto secreto con uno de los sistemas de atención médica más grandes de Estados Unidos para recopilar y analizar la información de salud personal detallada de millones de estadounidenses en 21 estados, según personas familiarizadas con el asunto y documentos internos.
La iniciativa, denominada ‘Proyecto Ruiseñor’, parece ser la más grande de una serie de esfuerzos de los gigantes de Silicon Valley para obtener acceso a datos de salud personales y establecer un punto de apoyo en la industria de la atención médica masiva.
Compañías como Amazon, Apple y Microsoft también están presionando agresivamente hacia la atención médica, aunque aún no han llegado a acuerdos de este alcance.
Google comenzó el esfuerzo el año pasado con Ascension, con sede en Missouri, el segundo sistema de salud más grande de Estados Unidos; y el intercambio de datos se aceleró desde el verano, según muestran los documentos.
Los datos involucrados en el Proyecto Nightingale abarcan resultados de laboratorio, diagnósticos médicos y registros de hospitalización, entre otras categorías, y equivalen a un historial médico completo, incluidos los nombres de los pacientes y las fechas de nacimiento.
Ni los pacientes ni los médicos han sido notificados. Al menos 150 empleados de Google ya tienen acceso a gran parte de los datos de decenas de millones de pacientes, según una persona familiarizada con el asunto y con los documentos.
Algunos empleados de Ascension han planteado preguntas sobre la forma en que se recopilan y comparten los datos, tanto desde una perspectiva tecnológica como ética, según las personas familiarizadas con el proyecto.
Pero los expertos en privacidad dijeron que parecía estar permitido según la ley Federal.
