Los industriales de las telecomunicaciones intentarán revertir en el Senado la decisión de la Cámara de Diputados de aprobar la aplicación del IEPS de 3% a los servicios de telefonía fija, móvil, internet, televisión de paga, trunking y radiolocalización de personas.
Alejandro Puente, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Telecomunicaciones por Cable (Canitec), dijo que se confía en que los senadores serán más conscientes de que este gravamen retrasará más al país en la adopción de servicios como banda ancha, frente a otros países de América Latina.
De prosperar el impuesto, la industria que representa tomará todas las acciones legales conducentes para impedir su aplicación; de lo contrario serán menos los mexicanos que accedan a los servicios de las tecnologías de la información y comunicaciones (TIC), advirtió.
En tanto, la Cámara Nacional de Electrónica Telecomunicaciones e Informática (Canieti) coincidió en que hay confianza en que los senadores eliminarán la imposición de ese impuesto debido a que las telecomunicaciones se han convertido en el principal motor para acelerar la recuperación económica, además de que contribuyen a la mejora de la educación, salud, seguridad y calidad de vida de la población, creciendo a tasas varias veces superiores al PIB.
IAB México, la asociación que representa a la industria de la publicidad en internet, exhortó al Senado a habilitar mecanismos legales para reconsiderar la entrada en vigor de este impuesto a partir del 1 de enero de 2010.
Al mismo tiempo, convocó a otros organismos de la industria como Amipci, Anatel, Amece y Canitec a hacer un frente común para proponer alternativas ante propuestas que comprometen la competitividad del país.
La Asociación Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) advirtió que la imposición de este gravamen afectará en mayor medida a la gente de menor poder adquisitivo.
Subirán precios
Según Ixe Grupo Financiero, como resultado de la aplicación de este nuevo gravamen es altamente probable que los operadores suban las tarifas de sus servicios, ya que se prevé que transfieran el impuesto al consumidor, lo cual frenaría las reducciones en precios de los últimos años como efecto de la competencia.
En telefonía celular prepagada los usuarios seguirían pagando el valor nominal de tarjetas, pero es posible que las empresas amortiguen el impacto del IEPS con ajustes a los minutos incluidos, elevando así el precio por minuto.
Si no se traslada el IEPS, “el impacto en el EBITDA de las compañías podría ser considerable”, señaló.
Sin embargo, la visión del Ejecutivo y de diputados es opuesta, pues consideran que este impuesto no tendrá un impacto importante en el gasto de las empresas y de los consumidores.
Fuente: El Universal, México
