Los reguladores de aviación de Estados Unidos ampliaron el jueves su advertencia sobre el servicio 5G que se lanzará el 5 de enero en nuevas frecuencias, argumentando que la interferencia potencial tendrá un impacto amplio en los sistemas de seguridad de las aeronaves.
La Administración Federal de Aviación (FAA) emitió una alerta de seguridad para operadores, advirtiendo que una amplia gama de dispositivos de seguridad de aeronaves podría funcionar mal, y estableció el proceso que seguirá en los próximos días para potencialmente emitir restricciones específicas en los vuelos.
Las acciones de la FAA se producen cuando las empresas de telecomunicaciones y aviación acordaron el miércoles compartir más datos en un intento de evitar lo que se ha convertido en un tenso enfrentamiento sobre si el servicio 5G podría interrumpir las operaciones de las aerolíneas y helicópteros.
La FAA está trabajando con las industrias inalámbrica y de aviación para encontrar una solución que permita que la banda C 5G y la aviación coexistan de manera segura, dijo la agencia en un comunicado que acompañó a la publicación de la alerta en un boletín de información de aeronavegabilidad especial.
En la alerta, la FAA identificó 17 sistemas de seguridad y funciones de aeronaves diferentes que podrían fallar si las ondas de aire 5G interfieren con los altímetros de radar que utilizan ondas de radio para calcular la altitud de una aeronave.
Además, está preparando lo que se conoce como Avisos a las misiones aéreas que pueden restringir los vuelos en docenas de lugares, informó.
‘Compartimos la confianza de la FAA y la FCC de que podemos y tendremos vuelos seguros y 5G robusto y confiable’, dijo Nick Ludlum, portavoz del grupo comercial de telecomunicaciones CTIA. ‘Seguimos trabajando estrechamente con la industria de la aviación y esperamos unirnos en los casi 40 países que ya operan 5G en la banda C el 5 de enero’.
Los datos de un altímetro de radar se introducen en numerosos sistemas en las aeronaves, desde la ayuda básica a los pilotos durante el aterrizaje, hasta múltiples dispositivos de seguridad, según la FAA.
Sus datos se utilizan para evitar choques en tierra y colisiones en el aire, por ejemplo. Pero también alimenta la automatización de la aeronave que controla la configuración del acelerador, la guía de despegue, las alertas de cizallamiento del viento y los inversores de empuje que ayudan a detenerse después del aterrizaje.
‘Las entradas de radio altímetro anómalas (faltantes o erróneas) podrían hacer que estos otros sistemas funcionen de manera inesperada durante cualquier fase del vuelo, más críticamente durante las fases de despegue, aproximación y aterrizaje’, dijo la FAA en la alerta de seguridad.