La solicitud de título de concesión que pidió en junio pasado la hoy extinta Luz y Fuerza del Centro (LFC) se queda en el archivo, a menos que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pida mediante un escrito a la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) hacerse cargo de dicha solicitud.
Héctor Osuna Jaime, presidente de la Cofetel, dijo que a la luz de que CFE absorberá las operaciones de lo que fuera LFC, habrá que esperar para conocer si la paraestatal está interesada en asumir la solicitud que se queda como pendiente.
“Si CFE se hace cargo, tienen que presentarse en Cofetel y notificarlo para continuar con el trámite, en tanto, hasta que no exista persona física o moral que se interese por esa solicitud queda en el archivo”, dijo.
Luz y Fuerza del Centro solicitó en junio a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) la concesión de un título para arrendar su infraestructura a las empresas de telecomunicaciones.
El año pasado, LFC había dicho que el objetivo era obtener una concesión de red pública de telecomunicaciones para prestar servicios de distribución de voz, datos y video a través de una filial de empresa y con ello aprovechar la infraestructura que tenía el organismo.
La expectativa era llevar el servicio a cerca de 25 millones de personas que viven en el Distrito Federal, Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala.
Recientemente, Gabriela Hernández, subsecretaria de Comunicaciones de la SCT, aclaró que la solicitud la presentó Luz y Fuerza y no el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) como se había dicho en un principio, y fue ella precisamente quien dijo que el asunto está en manos de Cofetel.
Respecto de la próxima licitación de un par de hilos de fibra óptica de la CFE, Héctor Osuna comentó: “Nos hemos mantenido al margen porque es una empresa que no regula la Cofetel”.
Pero reconoció que existe libertad tarifaria en el mercado, por lo que es impreciso calcular en cuánto podrían ser menores los precios de los servicios de telecomunicaciones a partir de que haya una empresa alterna a Comisión Federal de Electricidad y Telmex para arrendar infraestructura a las empresas.
Fuente: El Economista, México
