Al no ser tema con presencia real en la población, las tecnologías de la información no son prioridad para el desarrollo de naciones en AL
El tema de las Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC) y sus ventajas para el desarrollo económico, son un asunto que sólo ha permeado en los especialistas y la propia industria.
Este sector no ha logrado ubicarse dentro de las prioridades de los economistas, Gobierno, empresas y la propia sociedad civil de México y los países de América Latina, lo que ha impedido la conformación de una estrategia digital, aseguró el ex secretario ejecutivo del proyecto de Estrategia Digital de Chile, Alejandro Barros.
Al no tener presencia real en la mayoría de la población, el tema no se a colocado como un punto prioritario para el desarrollo de las naciones latinoamericanas, como lo ha sido para las economías de Finlandia, Suecia, Taiwán e India, entre otras, ni ha permitido el establecimiento de una visión de largo plazo más allá de los periodos de Gobierno, describió el especialista durante su participación en el Foro para el Desarrollo de la Infraestructura Tecnológica de Microsoft e Intel.
Sin embargo, el tema es vital para el crecimiento de México, pues si se aumentara en 10 puntos porcentuales la actual penetración de conectividad, que es de 7.2 accesos de banda ancha por cada 100 habitantes, se estimularía la economía y el bienestar social, comentó Ernesto Piedras, director de la consultora Competitive Intelligence Unit.
Por ejemplo, indicó, se incrementaría en 174 mil 850 millones de pesos el PIB, por la derrama de empleos y servicios que detonaría, recursos que serían casi el doble del presupuesto asignado a la Secretaría de Salud en este año.
Se generarían también un millón 631 mil empleos totales, los cuales se traducen en 158 mil 787 millones de pesos de inversión en la parte laboral y la Federación podría tener ahorros por casi 3 mil 548 millones de pesos en el presupuesto anual de salud.
Esto equivale al 4.12 por ciento del gasto para 2009, derivado de la utilización de servicios tecnológicos, historiales electrónicos, disponibilidad de información médica básica y eficiencia administrativa, detalló Piedras.
Fuente: Reforma, México
