En la feria Computex se presentaron los primeros equipos portátiles que aprovechan la superficie del teclado para introducir una pantalla completamente configurable.
Gregory Bryant, el máximo responsable de la división de computadoras domésticas de Intel, comenta: ‘Vamos a empezar a leer pantallas secundarias y otras formas de relacionarse con la computadora, y lo que es más evidente, vamos a ver productos que no tienen nada que ver con la computadora tradicional’.
El directivo se refiere a un cambio de paradigma, en el cual las computadoras personales se irán alejando poco a poco de formato convencional.
Ahora se trata de equipos que sustituyen el teclado físico por una pantalla, por lo general E-Ink, que va cambiando su disposición en función del uso del momento.
Es decir, si se va a redactar un correo electrónico o un documento, el sistema desplegará un teclado virtual completamente configurable, pero si nos encontramos en una reunión, esa superficie se convertirá, sin que el usuario haga nada, en un improvisado bloc de notas.
La tinta electrónica E-Ink tiene un papel fundamental en este terreno. Se trata de la misma tecnología que nos resulta familiar en los lectores de libros electrónicos, pero que en sus últimas versiones ha evolucionado al incorporar una superficie táctil y pantalla de color.
Estas pantallas ofrecen todo tipo de ventajas: por un lado, su consumo de energía resulta apreciable y por otro, puede ser configurada de la misma manera que una pantalla convencional.
Intel llamó la atención con el Tigger Rapids, un equipo con Windows 10 que consagra su teclado a una superficie E-Ink en color y que varía su contenido y distribución en función de la actividad que estamos llevando acabo.
Este dispositivo se parece tanto a una libreta que Intel le agregó una espiral de las que llevan los blocks para sujetar las hojas. El fabricante quiso avanzar más detalles.
Otro prototipo de Intel que llamó la atención presenta una disposición exactamente igual a la de una portátil, incluyendo sus bisagras, solo que en la parte del teclado ocupa la mencionada pantalla de tinta electrónica.
Sin embargo, quien podría primero dar la campanada sería Microsoft, que podría por fin dar forma a su rumoreado ‘Proyecto Andrómeda‘.
Aunque si de lo que se trata es de otorgar las autorías a los pioneros, no hay que olvidar que Apple fue la marca que integró, aunque sea en parte, este concepto de teclado versátil con el Touch Bar de su última versión de MacBook Pro, en la que la barra superior va variando su contenido en función de la actividad del usuario.