Content ID es una tecnología desarrollada por YouTube que permite localizar las imágenes y audios robados, aun cuando estos hayan sido modificados.
Esta plataforma detecta videos sin derechos de autor y rastrea, audios, imágenes y melodías para compararlas con el original.
Su efectividad es casi del 100%, no obstante que el material haya sido modificado, recortado, oscurecido o cambiado de color.
El objetivo de YouTube es combatir el robo de derechos para cubrir a la gran industria musical y cinematográfica.
El tamaño del desafío es enorme, ya que cada minuto se suben a YouTube 400 horas de video en todo el mundo. Hay 1,000 millones de visitantes cada mes y esta cifra aumentó el 50% en el último año y el 100% en dispositivos móviles.
‘Este es el desafío al que nos enfrentamos cada día: reconocer las copias que hayan sido o no transformadas’, explica Fabio Magagna, responsable de Content ID.
Más aún, la base de datos de Content ID tiene más de 600 años de contenido de referencia, más de 50 millones de archivos activos enviados por los 8,000 ‘partners’ (artistas, sellos discográficos, cadenas de televisión, etc.) con los que trabajan.
Se encuentra de todo: videos recortados, girados, puestos en blanco y negro, borrados, cambiados de colores y de tono, ¡o bien todo a la vez!
Inteligencia Artificial
Gracias al funcionamiento de la inteligencia artificial, las copias se identifican en segundos. Cuando dos archivos coinciden se produce el ‘match’. Las coincidencias se identifican en mapas de color con puntos brillantes. Todo esto en cuestión de segundos.
Desde hace dos años, utilizan el Machine Learning, una rama de la inteligencia artificial dedicada a tomar decisiones e interpretar datos basados en patrones, que permiten detectar e identificar los rasgos de manera escalable mucho más rápido.
Para los propietarios del contenido, el proceso sencillo: una vez que han mandado a YouTube el archivo para incorporarlo a su base de datos y Content ID ha reconocido un video con el mismo contenido, ofrece al propietario la posibilidad de bloquear el video, sólo rastrearlo o monetizar los beneficios que se generen gracias a los anuncios que se le incorporen.
Fuentes de YouTube comentan que el 90% de los propietarios decide monetizar su contenido, el resto prefiere bloquearlo y muy pocos eligen rastrearlo.
Con información de El País
