El Gobierno de Estados Unidos mantiene abiertas negociaciones con Facebook para aplicarle una sanción multimillonaria que podría llegar a la cifra récord de 5,000 millones de dólares por supuestamente violar las normativas antimonopolio, de acuerdo con The Wall Street Journal.
Según el diario, la Comisión Federal de Comercio, una agencia gubernamental encargada de velar por los derechos de los consumidores y por la libre competencia, ha estado investigando a la compañía durante más de un año.
Todavía no hay una decisión final sobre la sanción y, aunque el proceso ya está en su fase final, Facebook todavía está entregando a la Comisión documentos y testimonios para demostrar que ha cumplido con las leyes antimonopolio.
El CEO y cofundador de la empresa, Mark Zuckerberg, ha tenido que testificar y responder a preguntas de la Comisión en el marco de la investigación, de acuerdo a The Wall Street Journal, que cita a fuentes conocedoras del asunto.
Si se demuestra que Facebook eliminó a su competencia, la Comisión Federal del Comercio podría restringir su forma de operar o incluso ordenar que se separe en diferentes entidades.
Sin embargo, la Comisión no puede imponer de manera unilateral ningún cambio, ya que primero tendría que demostrar ante el sistema judicial de EU que la red social ha violado las leyes antimonopolio y que esos cambios en su estructura con absolutamente necesarios.
Por eso mismo, si el sistema judicial no interviene, la sanción de hasta 5,000 millones de dólares también tendría que ser fruto de un acuerdo entre Facebook y la Comisión.
Justo el lunes, The Washington Post reveló que la Comisión Federal del Comercio valora sancionar a Facebook por otro caso, relacionado con la gestión de la privacidad de sus usuarios.
Durante el año pasado, Facebook se vio implicada en numerosos escándalos relativos a su gestión de la privacidad, siendo el más sonado de ellos el de la consultora británica Cambridge Analytica, que utilizó una aplicación para recopilar millones de datos de internautas de la plataforma sin su consentimiento con fines políticos.
En marzo del pasado año, la Comisión Federal de Comercio confirmó que investigaba a la firma tecnológica tras la filtración de datos de unos 50 millones de usuarios a Cambridge Analytica y anunció que usaría todas sus herramientas para proteger la privacidad de los consumidores, incluidas acciones coercitivas.