El presidente ruso, Vladímir Putin, defendió las restricciones impuestas por el regulador de comunicaciones Roscomnadzor a YouTube y Google, destacando la necesidad de que estas plataformas respeten las leyes rusas.
El mandatario subrayó que tanto YouTube como Google deben distanciarse de las estafas en las redes y no utilizar sus plataformas para promover intereses políticos de otros gobiernos.
Putin explicó que los usuarios recurren a los motores de búsqueda para encontrar información relacionada con la música y la cultura, pero a menudo se enfrentan a contenidos que carecen de relación con estos temas y que, en su lugar, son utilizados para difundir propaganda política.
Además, acusó a las plataformas occidentales de eliminar el contenido relacionado con artistas, blogueros y políticos rusos.
El presidente señaló que esta situación constituye una violación de las leyes rusas y afirmó que las plataformas deben elegir entre respetar la legislación de Rusia o limitar su actividad a sus respectivos países. De no ajustarse a las normas locales, se les podrían imponer restricciones.
En cuanto a YouTube, actualmente ralentizado en Rusia, Putin responsabilizó a la plataforma de los problemas al señalar que, debido a las sanciones occidentales por la guerra en Ucrania, Google ha dejado de financiar sus operaciones en Rusia y ha dejado de suministrar el equipamiento necesario para su funcionamiento en el país. Esto, según Putin, ha generado dificultades adicionales para la plataforma.
Rusia ha impuesto en diversas ocasiones multas a las principales compañías tecnológicas occidentales por violaciones a sus leyes, tales como la negativa a eliminar contenido considerado ‘falso’ o la difusión de material prohibido.
En algunos casos, como los de Facebook, declarado ‘extremista’ desde el inicio de la guerra en Ucrania, y Twitter (actualmente X), las autoridades rusas han optado por bloquear sus servicios en el país.