SoftBank, empresa inversionista en el sector tecnológico, gastó alrededor de 2.3 mil millones de dólares en los últimos dos meses para la recompra de sus propias acciones, en apoyo al mercado.
La compañía nipona cerró su ejercicio fiscal con pérdidas de 961,576 millones de yenes (8,972 millones de dólares), lo que supone sus primeros números rojos desde hace quince años y los peores resultados desde su fundación en 1981.
Además, dijo que espera registrar una pérdida operativa récord de 1.35 billones de yenes para el año que finalizó el 31 de marzo.
SoftBank cerró el año fiscal hasta el 31 de marzo pasado con ingresos netos de 6.19 billones de yenes (57,714 millones de dólares), un 1.5% más que lo anotado en el ejercicio anterior.
Los datos del año fiscal recién terminado contrastan con los del ejercicio cerrado en marzo de 2019, cuando tuvo una ganancia neta de 1.41 billones de yenes (13,164 millones de dólares) y unos ingresos de 6.09 billones de yenes (56,838 millones de dólares).
SoftBank había estado entre los inversionistas más agresivos en startups en los últimos años, pero ahora está disminuyendo el valor de las participaciones en compañías como WeWork, Oyo Hotels y Uber Technologies.
La recompra anunciada a mediados de marzo inicialmente no aumentó las acciones, en medio de las preocupaciones de que la cartera de nuevas empresas del conglomerado es particularmente vulnerable al shock económico de la pandemia del coronavirus.
Cuando las acciones cayeron más del 30% en la semana siguiente, Masayoshi Son, su fundador, dio un paso sin precedentes al revelar una segunda recompra de hasta 12 millones de yenes.
