El 28% de las empresas en México ha enfrentado la fuga de información confidencial en los últimos dos años debido a brechas de ciberseguridad, de acuerdo con un informe de Kaspersky.
Los sectores más afectados incluyen gobierno, manufactura, retail, servicios de TI, salud y educación, que manejan grandes volúmenes de datos sensibles, como información financiera, datos personales y registros médicos.
La exposición de datos personales, que incluye nombres, direcciones, números bancarios y de teléfono, genera un impacto significativo en la reputación de las empresas, perjudica su competitividad y daña la confianza de empleados, clientes y socios.
Además, el incumplimiento de normativas de protección de datos representa un reto para el 24% de las empresas mexicanas con operaciones en distintas regiones, lo que incrementa los riesgos legales y financieros.
Las consecuencias de estas fugas van más allá de la reputación e incluyen posibles sanciones, demandas legales y la interrupción de operaciones. Los expertos subrayan que adoptar regulaciones estrictas y protocolos de seguridad robustos es esencial para mitigar estos riesgos y proteger la información crítica.