El gigante indio en informática proveerá al IMSS durante cuatro años servicios tecnológicos y de mantenimiento en aplicaciones de soporte, luego de ganar un contrato por US200 millones, el mayor que ha obtenido en Iberoamérica
México.- El gigante informático Tata Consultancy Services ganó un contrato de cuatro años por más de 200 millones de dólares para dar servicios tecnológicos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el mayor que ha obtenido en Iberoamérica, informó hoy la compañía india.
Como parte del contrato, Tata Consultancy Services (TCS), la mayor compañía del sector en la India, proveerá servicios al IMSS de mantenimiento de aplicaciones y soporte, desarrollo de software, servicios de análisis de negocios y administración de programas de tecnologías de la información.
La compañía, que forma parte del Grupo Tata, precisó en un comunicado que ganó el contrato después de una licitación pública que enfrentó a “tres compañías líderes en tecnología global y local tras una rigurosa evaluación”.
Con más de 370.000 empleados y 50 millones de afiliados, el IMSS es la institución de Seguridad Social más grande de su clase en Iberoamérica.
Recientemente TCS inauguró un centro de desarrollo en la ciudad de Guadalajara, en el oeste de México, donde empleará a más de quinientos profesionales en el corto plazo.
“México está emergiendo como un mercado clave para TCS en América Latina”, destacó en la nota el director ejecutivo de Operaciones Globales de la empresa, N. Chandrasekaran.
“El acuerdo con IMSS es el contrato más grande para nosotros a la fecha en Iberoamérica, seguido de similares negocios que hemos ganado en los años recientes con ABN Amro en Brasil, Registro Civil en Chile y Banco Pichincha en Ecuador”, explicó el presidente de TCS Iberoamérica, Gabriel Rozman.
Ello “marca” la entrada de la compañía hindú “como jugador clave en el sector de tecnología en México”, sostuvo.
Tata Consultancy cuenta con 100.000 empleados a nivel global, 5.000 de los cuales están distribuidos en Brasil, Chile, Ecuador, México y Uruguay.
Fuente: El Economista, México
