Twitter, Facebook, YouTube y Microsoft formaron una alianza para compartir información y crear una base de datos con los videos e imágenes que promueven el terrorismo, incluyendo material que intente reclutar directamente a los internautas o imágenes y memes violentos.
Las cuatro grandes firmas tienen como objetivo trabajar juntas e identificar y eliminar el contenido extremista en sus páginas.
Los atacantes suelen utilizar estas plataformas con el fin de convencer a nuevos miembros para que se adhieran a los grupos extremistas como el Estado Islámico.
Cuando algunas de estas redes sociales detecten algún contenido extremista, lo registrarán en la base de datos y lo compartirán con los demás. De esta manera, se podrá eliminar el contenido de su plataforma.
Un tema que habrá que superar es que cada una de estas compañías tiene criterios diferentes respecto a lo que se considera un contenido terrorista. Por esta razón, al inicio la información que será compartida será aquella que tenga rasgos con ‘las imágenes y los videos más extremos’, ya que serán estas las que más probablemente violen las políticas de contenido de todas las empresas.
Hany Farid, profesor de ciencias de la computación, que ha hecho importantes avances para combatir el contenido extremista, comentó que ‘es necesaria una transparencia completa sobre el material que se comparte en esta base de datos y, para ello, debe haber varios expertos en contenido extremista al mando. De lo contrario la transparencia dependerá exclusivamente de las empresas’.
La expansión de la actividad terrorista en la red ha llevado a contraataques virtuales de grupos de hackers como Anonymous, como los llevados a cabo en el atentado de París el 13 de noviembre de 2016. En ese momento, la red de ciberactivistas emitió un comunicado declarando la guerra al Estado Islámico en las redes, y publicaron una guía con instrucciones básicas para que cualquiera pudiera hackear las cuentas de los terroristas islámicos.
Con información de El País